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Verificado por Psychology Today

Michelle Braun Ph.D., ABPP-CN
Michelle Braun Ph.D., ABPP-CN
Memoria

3 Señales tempranas de un probable problema de la memoria

Cómo distinguir un "fallo cerebral" de un problema de la memoria y qué hacer al respecto.

Nadino/Shutterstock
Source: Nadino/Shutterstock

El olvido es común y le sucede a la mayoría de las personas, incluidos los campeones de memoria. La distracción, la fatiga, la depresión, la ansiedad y muchos otros factores pueden contribuir. Afortunadamente, la mayoría de los problemas de memoria son simplemente "fallos cerebrales": episodios temporales de olvido que no son un presagio de Alzheimer u otro trastorno de la memoria.

Los fallos cerebrales comunes incluyen la colocación errónea de objetos de uso frecuente, como llaves o gafas, olvidar por qué entramos en una habitación y dificultad periódica para recordar una palabra que queremos decir. Los fallos cerebrales están frecuentemente relacionados con factores situacionales y cambios normales relacionados con la edad. Para la mayoría de las personas, la flexibilidad mental comienza a ser un poco menos eficiente con cada década que pasa a partir del final de los 20 en adelante, y la memoria comienza a disminuir a finales de los 30, por lo que es común notar más problemas de memoria a medida que envejecemos.

Sin embargo, debido a que la tasa de Alzheimer y otros trastornos de la memoria también aumenta con la edad, y porque la memoria afecta a casi todos los aspectos de la vida diaria, muchas personas están ansiosas por obtener orientación sobre cómo distinguir entre los cambios normales de memoria relacionados con la edad y las señales de un trastorno de la memoria. Este enfoque ha aumentado en los últimos años a medida que la población de adultos mayores de Estados Unidos ha alcanzado niveles históricamente altos.

Una encuesta de 2011 de Met Life mostró que los 76 millones de baby boomers de Estados Unidos le temían al Alzheimer solo en segundo lugar después del cáncer. Además, una encuesta de Estados Unidos sobre Envejecimiento de 2015 encontró que 35 por ciento de personas mayores de 60 años estaban preocupadas por la pérdida de memoria (aproximadamente 23 millones), y una encuesta de 2017 realizada por el West Health Institute encontró que la pérdida de memoria era la principal preocupación de los adultos mayores de 60 años. Además, la Asociación de Alzheimer se refiere a la enfermedad del Alzheimer como "la enfermedad definitoria de los baby boomers", y estima que 10 millones de baby boomers eventualmente tendrán Alzheimer (lo que representa un aumento significativo de los 5.4 millones de estadounidenses que actualmente tienen la enfermedad).

Entonces, ¿cómo comenzamos a separar las señales de los cambios de memoria normales versus las que son anormales cuando la memoria misma puede verse afectada por docenas de variables diferentes? Aquí hay tres señales que pueden indicar un posible problema de memoria:

1. El nivel de memoria actual es notablemente más débil que antes, evidenciado por el incremento del olvido de información bien conocida y de uso frecuente.

Esto podría incluir olvidar el camino a la tienda, una receta conocida, un procedimiento familiar en el trabajo, el nombre de un amigo conocido o los nombres de objetos comunes y conocidos. Ese olvido de información familiar y de uso frecuente va mucho más allá de los "fallos cerebrales" relacionados que podrían incluir olvidar los nombres de conocidos que no has visto en años, olvidar cómo llegar a un lugar en el que solo has estado un par de veces, olvidar hacer un pendiente u "olvidar" información que nunca aprendiste completamente.

2. Aumento o nuevo olvido que no se puede explicar.

El incremento del olvido de eventos recientes (por ejemplo, conversaciones, actividades y citas) y/o nuevas dificultades para ejecutar las tareas diarias debido a problemas de memoria (por ejemplo, olvidar si has tomado medicamentos o pagado las facturas) puede ser problemático. Este es especialmente el caso si NO parece explicarse por un problema médico, emocional o situacional conocido (por ejemplo, algunas personas experimentan problemas temporales de memoria debido al estrés, falta de sueño, efectos secundarios de medicamentos, problemas de la tiroides u otros problemas médicos, y la memoria mejora después de corregir el problema subyacente). Ten en cuenta que olvidar los recuerdos de la infancia y otra información "remota" de hace muchos años no es una señal temprana común de un problema de memoria (aunque puede ocurrir en las etapas posteriores de un trastorno de la memoria), y esperar este tipo de problema de memoria puede resultar en un retraso en la búsqueda de ayuda.

3. Otros han notado que tu memoria está empeorando.

No es raro que alguien con un problema de memoria no sea plenamente consciente de ello, porque es posible que no recuerde su propio olvido. A menudo, aquellos con los que pasamos más tiempo son los primeros en notar un problema de memoria y pueden comentar si ha empeorado con el tiempo.

Ten en cuenta que las señales anteriores tienen algunos puntos en común. El olvido puede ser un problema potencial si:

  • Refleja una disminución notable con respecto a los niveles anteriores
  • No mejora cuando se abordan los posibles factores contribuyentes (y a menudo empeora con el tiempo)
  • Implica el olvido de información bien conocida
  • Perjudica el rendimiento de tareas conocidas
  • Es notable para los demás

Próximos pasos

Si tú o un ser querido tiene alguna o todas las señales de advertencia mencionadas anteriormente, eso no significa que definitivamente haya un trastorno de la memoria (especialmente porque la memoria puede verse afectada por docenas de factores). Más bien, sugiere que los siguientes pasos pueden proporcionar algo de ayuda:

1. Hablar sobre los problemas de memoria con un proveedor de atención médica.

Esto puede conducir a un "entrenamiento" para investigar posibles factores contribuyentes, que pueden incluir (a) pruebas de laboratorio para medir los niveles de la tiroides, vitaminas y otros niveles metabólicos; (b) análisis de posibles efectos secundarios de los medicamentos; (c) breve escaneo de la memoria (que proporciona una medida básica de las habilidades de pensamiento, aunque generalmente no da suficiente detalle para hacer un diagnóstico o detectar problemas sutiles y cómo tratarlos; (d) una evaluación neuropsicológica que analiza de forma estadística la memoria, la atención, el funcionamiento visual, el razonamiento, la formación de estrategias y otras habilidades (en otras palabras el "software" del cerebro) para determinar si hay problemas de memoria y la mejor forma de tratarlos (e) es posible sacar una neuroimagen (por ejemplo, TC o escaneo cerebral) para evaluar el "hardware" del cerebro.

2. Ejercicio.

Múltiples estudios han demostrado que el tratamiento más poderoso para los problemas de memoria leves es el ejercicio cardiovascular, que puede disminuir la tasa de pérdida de memoria e incluso mejorar la memoria. El ejercicio también aumenta la densidad del tejido cerebral en el hipocampo (un área de procesamiento de la memoria central) y los lóbulos frontales. Dado que los cambios cerebrales relacionados con el Alzheimer pueden comenzar 10-30 años antes del diagnóstico (en la variante de inicio tardío, donde los síntomas comienzan después de los 65 años), y dado que no hay tratamiento para detener la progresión del Alzheimer, es más ventajoso hacer ejercicio proactivamente. Sin embargo, nunca es demasiado tarde para comenzar. El ejercicio también puede disminuir la tasa de pérdida de memoria para aquellos que ya tienen Alzheimer moderado.

3. Aumentar la densidad neuronal.

Además del ejercicio cardiovascular, se ha demostrado que aumentar el número y la densidad de las vías neuronales en el cerebro mediante el fortalecimiento de la "Reserva Cognitiva" ayuda al cerebro a compensar los cambios relacionados con el Alzheimer, ¡y puede incluso prohibir que los síntomas de Alzheimer se expresen!

Ya sea que el olvido sea o no un "fallo cerebral" o un signo de un posible problema de memoria, nunca es demasiado tarde para comenzar a construir una mejor salud cerebral.

"El mejor momento para plantar un árbol fue hace 20 años. El segundo mejor momento es hoy". Proverbio Chino

Crédito de la imagen de LinkedIn:Maridav / Shutterstock

A version of this article originally appeared in English.

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