Gratitud
Cinco hábitos de la mañana para enfocar tu día
Cinco minutos puede parecer poco, pero pueden establecer tus intenciones para el día.
19 de octubre de 2021 Revisado por Kaja Perina
¿Cómo sueles empezar el día?
¿Presionas el botón de apagado varias veces, luego tienes que salir corriendo de la cama para prepararte para tu día?
¿Te despiertas lleno de ansiedad y preocupación?
¿Te despiertas desmotivado, sin querer salir nunca de tu cama?
¿Te despiertas emocionado de comenzar un nuevo día?
Para muchos, es difícil levantarse de la cama y entrar en su rutina diaria. A veces, tirar las sábanas sobre la cabeza y acurrucarse en una cama cálida y suave parece mucho mejor que enfrentar la realidad, pero ¿qué pasaría si todos adoptáramos unas cuantas rutinas matutinas de cinco minutos que hicieran que levantarse de la cama fuera un comienzo emocionante para nuestro día?
Estiramiento silencioso: Ya sea en tu tapete de yoga o en tu cama, pasa cinco minutos por la mañana estirando tu cuerpo mientras respiras profundamente. Cierra los ojos y establece un mantra para el día, y despierta tu cuerpo físico estirándote, un músculo a la vez.
El poder de la ducha: saltar a la ducha por la mañana a menudo se hace de forma apresurada, pero qué pasa si te tomas cinco minutos adicionales para disfrutar de tu ducha. Cierra los ojos y deja que el agua caliente corra sobre tu cuerpo. Luego, disfruta de un buen gel de baño o exfoliante con buen olor y espuma, canta, pon música e imagina eliminar tu somnolencia y re-energizar tu cuerpo por el resto del día.
Deja que la Madre Naturaleza entre en tu mañana: Ya sea que estés sentado en tu porche bajo el sol, dando una caminata de 5 minutos para sacar la basura, estirando esos cinco minutos en una caminata de 20 minutos o saliendo a correr al aire libre; pasar tiempo en la naturaleza por la mañana es un poder restaurador que puede ayudarte a estar listo para tu día.
Escuchar música: Pasar 5 minutos escuchando tu canción favorita, lista de reproducción favorita o estación de radio favorita puede mejorar tu estado de ánimo para comenzar el día. La música es sanadora, y puede hacerte sonreír por dentro y despertar recuerdos cálidos.
Disfruta de tu comida (y café): a menudo estamos tan apurados por la mañana que SI desayunamos, tomamos tres bocados mientras salimos por la puerta y tomamos nuestro café en el auto. ¿Qué pasaría si pasaras unos minutos cada mañana sentado y disfrutando de tu desayuno y café? Después de todo, el desayuno es tu primera comida del día y te proporciona la energía para completar tus tareas diarias. Disfruta de tu desayuno, saborea cada bocado y ten una alimentación consciente mientras notas cómo se ve, huele y sabe la comida con cada bocado.
Anota tus metas diarias: Vivimos vidas tan ocupadas con tantas tareas que parecen nunca hacerse. Dedica unos minutos cada mañana a escribir lo que deseas lograr para el día. Esto puede incluir tareas de trabajo, tareas domésticas, tareas personales. Una vez que tengas una lista de objetivos escritos, a menudo se vuelven más alcanzables cuando fijas tu mente en ellos.
Ancla tu rutina diaria comenzando una tarea matutina: Ya sea vaciar el lavavajillas, sacar la basura, doblar la ropa o lavar el espejo del baño, una tarea matutina sencilla no solo puede ayudarte a ordenar tu hogar, sino que también puede motivarte, ya que tienes una tarea menos que hacer al final del día. Además, comenzar la mañana con intención y actos con propósito puede ayudarte a motivarte a lo largo del día.
Expresar gratitud: Pasa cinco minutos cada mañana expresando gratitud por las cosas que tienes en tu vida. Ya sea una vida llena de amigos y familiares que te aman, tu salud, un techo sobre tu cabeza o una cama caliente para dormir, expresar activamente gratitud cada mañana puede ayudarte a aterrizar y apreciar el regalo del presente.
Conéctate con un ser querido: Envía un mensaje de texto rápido o un correo electrónico a alguien en tu vida y hazle saber que estás pensando en ellos. Practicar la bondad en la mañana hacia los demás puede volver a ti diez veces a lo largo del día.
El ejercicio aumenta las endorfinas: una de mis cosas favoritas por la mañana es salir a correr, hacer senderismo o esquiar antes de comenzar a trabajar. La actividad física ayuda a despejar y calmar la mente, y también aumenta las endorfinas que provocan placer. Por lo tanto, el ejercicio diario no solo es bueno para tu cuerpo físico, sino también para la mente.
A version of this article originally appeared in English.