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Verificado por Psychology Today

Sexo

12 maneras de detectar a un misógino

Los hombres que odian a las mujeres pueden no ser conscientes de esto. Pero sus actos lo demuestran.

Michal Bednarek/Shutterstock
Fuente: Michal Bednarek/Shutterstock

Sí, los misóginos. Es posible que algunos de nosotros hayamos oído de ellos. Pero lo que quizás no todos nos hemos dado cuenta de que pueden estar en cualquier parte, incluso a nuestro alrededor. A veces pueden ser difíciles de detectar. Aunque nos gustaría, no vienen con una etiqueta pegada, e incluso puede parecer que están a favor de la mujer.

En la mayoría de los casos, los misóginos ni siquiera saben que odian a las mujeres. La misoginia es típicamente un odio inconsciente que los hombres forman a temprana edad, a menudo como resultado de un trauma que involucra a una figura femenina en la que confiaban. Una madre, una hermana, una maestra o una novia abusiva o negligente puede plantar una semilla en el fondo de la materia subcortical de su cerebro.

Una vez plantada, esta semilla germinará y comenzará a crecer, la pequeña raíz se extenderá por las áreas de procesamiento del miedo y la memoria del cerebro a medida que su diminuto tallo avance hacia las áreas frontales del cerebro, lo que afectará la emoción y la toma de decisiones racionales.

Los primeros signos de misoginia apenas se notan, pero con una exposición adicional al abandono, el abuso o la falta de tratamiento, este comportamiento se volverá más y más prominente. Pero incluso cuando la misoginia alcanza la madurez y la tendencia a actuar con odio hacia las mujeres ya no se puede controlar, el misógino y las mujeres a su alrededor a menudo no notarán la condición hasta que sea demasiado tarde.

Estos son los rasgos típicos de un misógino:

  1. Se concentrará en una mujer y la elegirá como su objetivo. La mujer no estará alerta porque al principio el misógino es insinuante, apasionante, divertido y carismático.
  2. A medida que pasa el tiempo, comienza a revelar una personalidad como la del doctor Jekyll & y el señor Hyde. Puede cambiar rápidamente de irresistible a grosero y de grosero a irresistible.
  3. Hará promesas a las mujeres y, por lo general, no las cumplirá. Con los hombres, por otro lado, casi siempre cumplirá su palabra.
  4. Llegará tarde a encuentros y citas con mujeres, pero será bastante puntual con los hombres.
  5. Su comportamiento hacia las mujeres en general es grandioso, arrogante, controlador y egocéntrico.
  6. Es extremadamente competitivo, en especial, con las mujeres. Si a una mujer le va mejor que a él social o profesionalmente, se siente terrible. Si a un hombre le va mejor, puede tener sentimientos encontrados al respecto, pero es capaz de ver la situación objetivamente.
  7. Sin saberlo, tratará a las mujeres de manera diferente a los hombres en el lugar de trabajo y en los entornos sociales, y les permitirá a los hombres varias libertades por las que criticará a sus colegas o amigas.
  8. Estará preparado (inconscientemente) para usar cualquier cosa que esté a su alcance para hacer que las mujeres se sientan miserables. Puede exigir sexo o negar el sexo en sus relaciones, hacer bromas sobre las mujeres o menospreciarlas en público, “tomar prestadas” sus ideas en contextos profesionales sin darles crédito, o pedirles dinero prestado sin después pagarles.
  9. En una cita, tratará a una mujer de la forma opuesta a la que ella prefiere. Si ella es una dama de las que prefiere un “caballero” que le abra la puerta, ordene para ambos y pague por la comida, él la tratará como a uno de sus amigos masculinos, ordenará por sí mismo, y dejará que pague por toda la comida si ella se ofrece (y a veces incluso si ella no lo hace). Si es una mujer más independiente que prefiere pedir su propia comida y pagar por sí misma, él ordenará groseramente para ambos y pagará la cuenta cuando ella va al baño.
  10. Sexualmente, le gusta controlar a las mujeres y presta poca o ninguna atención al placer sexual femenino. El juego previo, si es que ocurre en absoluto, es solo un medio necesario para un fin. Le gusta el sexo oral, pero solo como receptor. Sus posiciones favoritas le permiten evitar mirar a la mujer a los ojos.
  11. Engañará a las mujeres con las que está saliendo o a la mujer con la que está en una relación. La monogamia es lo último que considera deberle a una mujer.
  12. Puede desaparecer repentinamente de una relación sin terminarla, pero puede volver tres meses más tarde con una explicación diseñada para atraer a la mujer de vuelta.

Pocas veces un misógino poseerá cada una de estas características, lo que hace que sea más difícil identificarlos. Su capacidad para atraer a las mujeres con su encanto y carisma se suma a la dificultad de detectar las señales de alerta temprana.

Los que odian a las mujeres (inconscientemente) disfrutan de tratar mal a las mujeres. Cada vez que pueden dejar a una mujer o herir sus sentimientos, inconscientemente se sienten bien porque en el fondo de su cerebro, sin saberlo, se recompensa su mal comportamiento con una dosis del químico del placer dopamina, lo que les hace querer repetir el comportamiento una y otra vez.

Berit Brogaard es autora de On Romantic Love

A version of this article originally appeared in English.

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Acerca de
Berit Brogaard D.M.Sci., Ph.D

La Dra. Berit Brogaard, Maestría en ciencias, es profesora de filosofía y directora del Brogaard Lab for Multisensory Research en la Universidad de Miami.

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