¿Qué necesitan los hombres de las mujeres? 5 reflexiones.

¿Cuántas veces te has sentido molesto por algo que tu pareja masculina dijo o no dijo, hizo o no hizo y luego te descubriste concluyendo que cualquiera que sea el problema resulta de su propia masculinidad, por el simple hecho de que él es un hombre, que simplemente “no puede evitarlo”? Algunas cosas se dicen una y otra vez cuando las mujeres hablan de problemas con sus hombres: “pero ya sabes, así son los hombres” o “es un hombre después de todo, no es su culpa” o “¡HOMBRES!” Por lo general, las mujeres que escuchan asienten y ríen, concordando absolutamente. Estos y otros lugares comunes se recitan como una forma de minimizar su angustia y frustración. Sin embargo, esta tendencia a descartar a los hombres como genéticamente deficientes refuerza para ellos la idea de que no es seguro ser ellos mismos con sus parejas femeninas.

Es importante tener en cuenta que la investigación demuestra consistentemente que los hombres y las mujeres son más parecidos que diferentes, comparten una estructura cerebral casi idéntica, necesidades similares de logro y conexión, y generalmente quieren las mismas cosas de la vida. Las diferencias están en los matices y, aunque son importantes, no deben usarse para relegar a los hombres a un espacio lejano del universo que las personas normales, es decir, las mujeres, encuentran inhóspitas.

Los hombres son socializados a partir de la infancia para ajustarse a lo que la cultura valora como masculino. Esto incluye tener el control de las propias emociones, ganar a toda costa y no mostrar vulnerabilidad. Los hombres que no se conforman completamente, a menudo son estigmatizados socialmente y pueden ser vistos por otros como "femeninos" en alguna manera vaga. Los hombres que muestran vulnerabilidad pueden ser llamados “mariquitas” o, actualmente en de moda,“vaginas.” La investigación sugiere que los hombres que sienten que deben ajustarse rígidamente a las normas de género masculino son más propensos a suprimir las emociones que los hacen sentir vulnerables. Estas son las mismas emociones necesarias para la intimidad emocional con una pareja romántica.

Como mujeres a menudo reforzamos el mismo condicionamiento de género que aleja a los hombres. Un enfoque más eficaz es amortiguar esta dura realidad cultural teniendo en cuenta estos cinco puntos.

1. Él quiere en lo más profundo gustarte y que lo ames por sí mismo y no solo por lo que puede hacer por ti.

La socialización masculina enseña que su valor está en su albedrío, es decir, en su capacidad para actuar, hacerse cargo, controlar, ganar, lograr, o arriesgarse a recibir el peyorativo "mariquita". No dejes que esta parte superficial de él te engañe. Debajo de este condicionamiento hay un niño que, al igual que tú, quiere sentirse amado por lo que es. Él desea a alguien que puede estar bien con él, incluso cuando no está ganando, produciendo o "en la cima". Puede que no sea capaz de decirte esto, así que cuando no se siente "lo suficientemente bueno" puede que ni siquiera lo sepas. A diferencia de las mujeres, los hombres tienen más dificultades para hablar de sus emociones "más débiles". Si mantienes esta clave en mente, puedes notar otras cosas importantes acerca de él. ¿Qué tan gracioso es? ¿Qué tan bueno es pasar tiempo con él? ¿Qué tanto te gusta hablar con él sobre tu día? Abre el diálogo hasta su esencia, no solo su destreza.

2. Quiere que te gustes.

Si lo estás usando para sentirte bien contigo, nunca será suficiente y estarás constantemente en busca del próximo impulso. Él experimenta esto como dependencia y puede volverse oneroso para no sentirse libre de ser su auténtico yo. Adicionalmente, hay típicamente una correlación entre qué tanto no se aceptan las mujeres y su tendencia a criticar e hipercontrolar al hombre en sus vidas. Esto se debe a que las personas tienden a proyectar características en otras que las reflejan a ellas mismas. En otras palabras, si no estás contenta contigo misma, puedes ser demasiado crítica con él. Como regla general, la retroalimentación a tu pareja debe ser 75 por ciento positiva, 25 por ciento negativa. Si la proporción se invierte, estás activando la criptonita para muchos hombres lo que los hace sentir interminablemente molestos y criticados. Cuando este es el caso, adquieren la sensación de que nunca pueden hacerlo bien. Esto, invariablemente, los lleva a desconectarse y evitar a la mujer en su vida.

3. Quiere que confíes en su capacidad para comunicarse.

Noticias recientes: resulta que toda la propaganda sobre que los hombres no pueden comunicarse está equivocada, los hombres realmente pueden comunicarse. "Los hombres son de Marte", "Los hombres son neandertales", estas frases refuerzan el estereotipo de que los hombres no pueden hablar de sus sentimientos o motivos más que con un punto de vista de alguien en cuarto grado. Y estos descriptores refuerzan aún más la adopción masculina de la idea de que si comunican pensamientos o emociones más vulnerables, pueden ser estigmatizados como demasiado blandos. Si te encuentras diciendo cosas como esta, detente y dale una oportunidad. Sí, las mujeres son más verbales, por lo general hablan de sus sentimientos de manera más rápida y sucinta que los hombres. Pero los hombres saben lo que piensan y sienten. En lugar de avergonzarlo, cuando puedes ver que está tratando de expresar algo vulnerable tómalo en serio, haz preguntas. Asegúrate de darle las gracias por tratar de hablar contigo en este nivel. Confía en mí, si haces esto, él hablará más y verás que bajo su apariencia de virilidad hay un hombre que habla articuladamente y tiene sentimientos muy similares a ti.

4. Quiere que seas juguetona.

No es para generalizar porque todas las mujeres son diferentes, pero muchas son maestras en la organización, la multitarea y el cuidado de las cosas. Puede ser demasiado fácil hablar con tu pareja sobre la agenda para este día o el día siguiente, lo que hay que hacer etc. Él quiere verte dejar de lado el control y ser espontánea, juguetona y estar en el momento con él. Su amor tiene la oportunidad de profundizar cuando lo involucras sin agendas y controles. Se siente como si fuera una persona real que ves y escuchas y no solo una pieza que mueves en tu tablero de ajedrez de tareas.

5. Quiere que sepas que los chicos lloran.

En el fondo, al igual que tú, los hombres son seres vulnerables. No castigues o minimices si ves incluso una pizca de tristeza; deja que tenga su momento. Puede o no llorar, y ciertamente los hombres suelen ser socializados para llorar menos que las mujeres. Sin embargo, es importante que sus emociones negativas sean validadas y escuchadas. Los niños y los hombres son tan avergonzados en nuestra cultura por ser vulnerables que a menudo se quedan con una sola opción para ventilar los sentimientos negativos: la ira. Ofrécele un lugar en el mundo donde pueda llevar incondicionalmente a su ser completo a la mesa y donde no juzgues. No evites sus miedos o molestias, ofrece compasión y comprensión, dos cualidades importantes de las que los hombres no tienen suficiente durante la infancia y la edad adulta.

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Cuando te encuentres tratando de entender algo que te parece inaceptable, detente, respira y recuerda; en el fondo, la mayoría de los hombres quieren lo que las mujeres quieren: aceptación por lo que son, amor y refuerzo positivo por lo que hacen bien y por lo que están tratando de contribuir.

Derechos de autor Jill Weber Ph.D.

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