Relaciones
¿Te ofendes fácilmente?
Hablemos del por qué y qué hacer al respecto.
9 de junio de 2023 Revisado por Davia Sills
Los puntos clave
- Las personas que se ofenden fácilmente pueden percibir que sus creencias o identidad personales son amenazadas
- Hacer suposiciones sobre las intenciones de otra persona también puede hacer que una persona sea más reactiva.
- Desarrollar la autoestima y presionar "pausa" pueden ser formas útiles de calmarse.
Tal vez no te ofendas fácilmente. ¡Si es así, felicitaciones!
O tal vez...
- Ya sabes que te ofendes fácilmente (incluso si se trata de un tema o problema específico), y es algo que estás listo para abordar.
- Sospechas que eres más sensible que los demás y te preguntas si hay algo que puedas hacer al respecto.
- Nunca has considerado que tu mecha corta es un hipo personal que podría estar frenándote en la vida y las relaciones... hasta ahora.
Cualquiera que sea el caso, argumentaré que ser el tipo de persona que se ofende fácilmente crea mucho estrés, conflicto y drama innecesarios en la vida. Y si esto resuena contigo o alguien que conoces, este artículo puede ayudarte a comprender de dónde proviene ese impulso de ofenderte rápidamente y qué se puede hacer al respecto.
¿Qué hace que las personas se ofendan tan fácilmente?
Casi todos nos sentimos ofendidos a veces, ya sea en respuesta a algo que alguien (o no) hizo o dijo (o no), o incluso en respuesta a lo que nosotros asumimos sobre las palabras, intenciones o acciones de alguien.
Para ser claros, de ninguna manera estoy excusando comportamientos intencionalmente hirientes: cuando otras personas te tratan mal, tienes todo el derecho de expresar tus sentimientos, establecer algunos límites y, si es necesario, distanciarte. Pero cuando estás constantemente irritado, ofendido o molesto por otros (o incluso por otras "entidades", como un grupo político), eso es una fuerte indicación de que podrías beneficiarte de cambiar tu mentalidad en lugar de exigir que otras personas cambien—o incluso se disculpen, para el caso.
Para ayudar a darle sentido a esto, veamos algunas razones por las que ciertas personas se ofenden con tanta frecuencia:
- Tienen problemas emocionales o psicológicos no sanados relacionados con experiencias pasadas.
- Perciben que su honor, creencias personales o ideológicas, o imagen pública están siendo amenazadas.
- Son conscientes de algo.
- Su estado emocional, en general, se ve afectado negativamente por el consumo excesivo de noticias y redes sociales, hábitos de vida poco saludables, afecciones de salud mental no diagnosticadas o poco tratadas, etc.
- Simplemente tienen el hábito mental de tomar las cosas demasiado personalmente y pueden tener dificultades para considerar las cosas desde el punto de vista de otra persona.
Para ser franco, todas estas razones realmente se pueden resumir en una palabra: inseguridad.
La persona insegura verá constantemente las acciones (o inacciones) de otras personas como una amenaza para su sentido de sí misma. Cuando alguien no hace o dice lo que queremos o esperamos que haga, esto puede ser muy incómodo y desconcertante para aquellos de nosotros que somos inseguros. La inseguridad nos hace depender casi exclusivamente de cosas y condiciones externas para ayudarnos a sentirnos más seguros en el mundo, y dado que lo externo no está bajo nuestro control, a menudo nos quedamos tambaleándonos, reactivos y a la defensiva.
Por el contrario, la persona segura está dispuesta y es capaz de no tomarse las cosas tan personalmente todo el tiempo, tal vez incluso en situaciones en las que otra persona está tratando de ofenderla intencionalmente. ¿Cómo? Porque el individuo seguro entiende que lo que otras personas hacen y dicen en última instancia no tiene nada que ver con él. Las personas que están seguras de sí mismas tienen menos probabilidades de percibir las palabras o comportamientos de otras personas como ataques personales y más probabilidades de comprender que lo que otras personas hacen y dicen es simplemente el resultado de sus propias experiencias, suposiciones, conocimientos y creencias personales. La seguridad emocional nos otorga una rica base interna de autoestima, aprecio y amor que podemos usar para mantenernos firmes incluso frente a la adversidad.
"Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento".- Eleanor Roosevelt
Qué puedes hacer para dejar de sentirte tan ofendido todo el tiempo:
Si estás cansado de sentirte "detonado" tan fácilmente y estás listo para dejar el hábito, aquí hay algunas cosas que podrían ayudarte:
Invierte en cosas que fortalezcan tu autoestima.
Investigaciones, como un documento de 2018 publicado en el Journal of Theoretical and Philosophical Psychology, sugiere que tener una autoestima alta actúa como un amortiguador que puede evitar que te sientas ofendido tan fácilmente.
Cosas que ayudan a fortalecer la autoestima: apoyarte en tu red de respaldo de seres queridos, aceptar desafíos, documentar sus logros en un diario y tratarte y hablarte a ti mismo como alguien a quien vale la pena cuidar (pista: ¡lo eres!).
Practica la "pausa".
Tómate unos momentos para hacer una pausa y respirar cuando sientas que algo te detone. Esta es una estrategia efectiva para crear más conciencia sobre el hábito de ofenderte. También animo a las personas a usar este momento de pausa para notar lo que sienten en sus cuerpos, tal vez tensión en el pecho o calor en la cara. Al enfocarnos en estas sensaciones físicas, podemos anular nuestras reacciones emocionales instintivas y volvernos más presentes e intencionales.
La buena noticia adicional: no tienes que ser perfecto. Hacer una pausa para momentos de atención plena requiere práctica e incluso darte cuenta de que no hiciste una pausa en este momento es un paso en la dirección correcta.
Trabaja en equipo con un terapeuta.
Como dije, aprender a desarrollar herramientas y estrategias como la "pausa" requiere práctica—y para este fin, obtener ayuda profesional puede ser mucho más productivo y eficiente a largo plazo.
A través de la terapia de conversación y las intervenciones relacionadas, un consejero de salud mental con licencia puede ayudarte a perfeccionar estas habilidades, aclarar y sanar traumas pasados, ser más consciente de tus suposiciones y hábitos mentales, y profundizar tu comprensión de ti mismo y tus relaciones. Considera contactar a un profesional si te tomas en serio la evolución de este aspecto de tu personaje. Para encontrar un terapeuta cerca de ti, visita el Directorio de Psychology Today .
A version of this article originally appeared in English.