Cómo descubrir a un sociópata en tres pasos.

Ya sea que estemos intentando descubrir a un posible asesino adolescente, a una pareja romántica peligrosa, a un completo mentiroso en el trabajo a un estafador en internet o alguien intentando hacer un negocio cuestionable con nosotros, siempre es útil conocer las señales de advertencia de los sociópatas. Los sociópatas pueden tener algunas características de personalidad ocultas y peligrosas.

El manual estadístico y de diagnóstico de desórdenes mentales lista 10 criterios para diagnosticar el desorden de personalidad antisocial (ASPD), pero asume que quien lo consulta tiene entrenamiento profesional y mucha información acerca del individuo que se quiere diagnosticar. Mi intención no es enseñarle a nadie cómo diagnosticar un desorden de ASPD o cómo distinguirlos de un sociópata (o un psicópata o un estafador)

Esta publicación se enfoca en algunas pistas que podrían notarse durante los primeros encuentros con una persona así. Estas pistas podrían ayudar a tomar la decisión de mantener una distancia a pesar de lo atractiva que pueda parecer esa persona en la superficie. Para no ser una diana fácil.

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El tema del dominio

El Manual dicta que la característica principal es la facilidad con la que "atropellan (o violan) los derechos de los demás." A partir de mi experiencia de más de 30 años tratando con casos legales, conflictos familiares, disputas laborales y otras situaciones como consultor de alto conflicto, yo diría que la fuerza que mueve a los sociópatas (y tienen mucha fuerza) es el deseo de dominar a los demás. Esto puede involucrar romper la ley pero no es necesario que así sea. Quieren dominar a las personas con el fin de obtener cosas de ellos, como sus posesiones, dinero, sexo, socios de negocios, hogares, coches, inversiones, reputación y más. Pero también disfrutan de dominar a otros solo por cómo se siente, por esa sensación de poder y control. Los sociópatas carecen de una consciencia, así que harán lo que sea para obtener lo que quieren.

El método de tres pasos que yo recomiendo usar para saber rápidamente si alguien tiene características sociopáticas (o cualquier patrón de personalidad de alto conflicto) es lo que yo llamo el Método WEB®. Se trata de analizar sus palabras, las emociones que generan y sus comportamientos (que involucran acciones que el 90% de la gente jamás haría). Estas son varias pistas que se pueden descubrir en alguien a través de este método.

Sus palabras

Los sociópatas hablan rápido. Sus palabras son mayoritariamente falsas, aunque no por completo. Pero usan muchas, muchas palabras diseñadas para cubrir sus comportamientos. Pueden ser una persona completamente distinta de la que dicen ser. Así que hay que fijarse en los dos extremos: tanto grandes promesas y grandes historias sobre el pasado o el futuro y grandes planes, sin ningún fundamento o experiencia para lo que sea que están planeando.

Palabras extremadamente positivas. ¡Eres lo mejor! ¡No podría vivir sin ti! ¡Nunca le haría daño a nadie! ¡Mereces lo mejor! ¡Me conviertes en una mejor persona! ¡Seremos ricos! ¡Eres la persona más hermosa [inteligente, persuasiva, honesta, ética, espiritual, etc] que he conocido! ¡Viajaremos por todo el mundo! ¡Te presentará a gente muy famosa! ¡Creéme!

Palabras extremadamente negativas. Por otro lado, sus palabras pueden tornarse extremadamente negativas, cuando ya llevan un tiempo de conocernos. Nos culparán a nosotros (su Receptor de Culpa) por ofensas pequeñas o inexistentes: ¡Me mentiste! (Aunque no sea así y ellos sean quienes mienten constantemente). ¡Nunca confiaré de nuevo! ¡Nadie querría contratar a alguien como tú! ¡Nadie querría estar con alguien así! ¡Me perteneces! ¡Te destruiré! ¡No le digas a nadie lo que estamos haciendo o haré que te lastimen! ¡Mereces el castigo después de lo que hiciste! ¡Me lo debes! ¡Yo nunca te he lastimado pero mira lo que me hiciste!

Cambios repentinos. Los sociópatas con frecuencia pasan de un encanto extremo a amenazas extremas para obtener lo que quieren, dependiendo de lo que noten que está funcionando en determinado momento y qué no. Debemos estar atentos a las opiniones fuertes, las cuales abandonan de repente para adoptar el punto de vista opuesto si les conviene más. Usarán las palabras que perciban que les están ayudando a dominar la situación en el momento, como la paleta de colores de un pintor.

También descubrirán nuestras debilidades y vulnerabilidades. Puede que las usen de maneras positivas, con palabras para levantarnos el ego: Tendrás mucho éxito. Con mis conexiones y tu cerebro, lo tenemos todo. O puede que jueguen con nuestros temores más profundos: ¿Ves? Tu cuerpo no es para nada atractivo. Nadie querría ponerse íntimo contigo. O Nadie te contrataría. Soy lo mejor que podrías conseguir. Más vale que me agradezcas, mucho.

Nuestras Emociones

¿Cómo nos sentimos alrededor de la persona? Con frecuencia, son nuestras emociones las primeras en advertirnos que tengamos cuidado, porque nuestros cerebros quieren creerles. Muchas personas se casan con sociópatas o los contratan o hacen negocios con ellos o los eligen para posiciones de responsabilidad, a pesar de haber visto algunas señales de advertencia. Querían creer las palabras de la persona y no prestarle atención a cómo se sentían. Por eso, es importante confiar en lo que sentimos más que en sus palabras. Si se presenta un sentimiento extremo o de incomodidad, hay que prestarle atención. Podemos hacer una pequeña investigación acerca de lo que la demás gente piensa de esa persona.

Miedo. Una de las sensaciones más comunes alrededor de un sociópata es el miedo de que podrían lastimarnos si así lo quisieran. Los sociópatas pueden ser depredadores, así que tendría sentido que nos sintiéramos incómodos con ellos. Puede que de repente tengamos la sensación de querer escapar de la situación. En ese momento, debemos irnos, sin importar nada. No les debemos permitir que nos convenzan de no tener miedo. Es mejor tomarnos el tiempo de obtener más información sobre ellos.

Amor ciego. Este es el otro extremo. Debido a sus numerosas palabras positivas, la gente puede enamorarse de ellos, especialmente si están solitarios, llorando una pérdida o si tienen baja autoestima en ese momento. Esto también funciona al contratar a alguien. En la actualidad vivimos en un mundo empresarial competitivo y con un ritmo sumamente rápido en el que los sociópatas pueden fácilmente hacerse ver como super estrellas. Cuando nos sentimos impactados por un posible socio de negocios, empleado o empleador, podría ser que estuviéramos cayendo ante un sociópata. Como están en todos lados, debemos mantener un nivel sano de escepticismo, sin importar donde estemos.

Extrema compasión. A veces nos sentimos sumamente compasivos hacia alguien, tal vez sea buena idea asegurarnos de los motivos. Los sociópatas son muy hábiles en hacerse ver como las víctimas y cuentan excelentes historias para probarlo. Con frecuencia se aprovechan de la gente en situaciones vulnerables o preocupantes (los ancianos, víctimas de desastres naturales, fieles de iglesias, voluntarios, etc.). Aprovechándose de nuestra compasión, pueden ser capaces de hacernos hacer cosas que usualmente no haríamos por nadie más.

Su Comportamiento (La regla del 90%)

Una manera sorprendentemente simple de descubrir a un sociópata es mantener el enfoque en su comportamiento e ignorar sus palabras. Sobre todo, hay que prestar atención a cualquier comportamiento extremo, cosas que hacen y que el 90% de la gente no haría. Debemos preguntarnos ¿Yo sería capaz de hacer algo así? El comportamiento extremo es común entre los sociópatas, pero lo cubren rápidamente con excusas: Estaba cansada. Estaba bajo mucho estrés. La otra persona lo provocó. Tuve que hacerlo por lo que hizo la otra persona. Casi no importa cuál fue el comportamiento; sus excusas suelen ser las mismas. Siempre están libres de culpa y difícilmente se disculpan, a menos de que los atrapen y disculparse ayudaría a verse bien.

Receptores de culpa. Como mencioné anteriormente, muchos sociópatas terminan enfocándose en Receptores de Culpa, gente cuyo maltrato les parece justificado, ya sea en sus familias, en el trabajo o en sus comunidades. Con frecuencia disfrutan el sufrimiento de las demás personas. Mientras que podrían engancharse con quien sea, la mayoría de la gente los evita. Aquellos a quienes mantienen en la mira y contra los que se enganchan son aquellos que mantienen una relación con ellos. Ya sea porque le responden agresivamente al sociópata (que puede ser más agresivo que casi cualquier otra persona) o muestran su miedo o frustración. Ambos enfoques son insensatos. Es mejor desengancharse tranquilamente que demostrarles cómo afectaron nuestras emociones. Probablemente disfrutarán de causar una ira considerable o una frustración impotente, porque confirman que están dominando.

Sonrisas, muecas y risas. Un aspecto sorprendente es ver la manera en la que disfrutan el dolor y sufrimiento de las personas. En casos legales, he visto a sociópatas sonreír, hacer muecas y hasta reírse abiertamente cuando una víctima cuenta su historia en una declaración o en la corte. Llama la atención, porque, de nuevo, el 90% de la gente jamás haría eso. Serían más conscientes y sentirían empatía por la víctima. Si hay alguien sonriendo, haciendo muecas o riéndose en voz alta mientras miran el dolor de otra persona en la televisión, en una película, en la calle o en un accidente, probablemente sea un sociópata que no puede evitarlo.

Historial de comportamiento en la infancia. Uno de los criterios para el desorden de personalidad antisocial (sociopático) es que la persona muestra señales del desorden alrededor de los 15 años. Esto podría incluir comportamientos como torturar y matar animales pequeños o mascotas, robarle a sus familias o a extraños, causar incendios, o un severo patrón de mentiras. Esto es sorprendentemente común para los sociópatas, así que podrían intentar ocultar esos comportamientos o dar excusas. El asesino de la escuela de Parkland en Florida, aparentemente tenía un historial de lastimar animales. Mucha gente sabía eso, pero tal vez no entendieron el potencial que indicaba.

Este es un vistazo muy breve hacia algunas de las pistas de que podríamos estar tratando con un sociópata. El método WEB® es una manera de organizar nuestros pensamientos sobre la gente que conocemos y podríamos considerar como parejas románticas, colaboradores, socios o para ser elegidos a puestos gubernamentales. Toma práctica, pero está diseñado para ser simple y evitar ser un objetivo, especialmente cuando es necesario tomar decisiones rápidas estando bajo estrés. Para más información está mi libro: Cinco tipos de persona que pueden arruinar tu vida.