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La investigación ha demostrado que pasar tiempo en exteriores es bueno para nuestros cuerpos y nuestras mentes. Estoy seguro de que has experimentado estos beneficios: después de sentirte estresado o aburrido en el interior, sales y te levantas el ánimo.
Una gran manera de pasar tiempo al aire libre es la jardinería. Mi padre siempre tuvo un jardín cuando yo era un niño, y ahora entiendo más sobre lo que lo atraía a él. Siempre me ha gustado estar al aire libre y la jardinería, pero tomó un significado especial para mí cuando me estaba recuperando de una enfermedad prolongada. Cuando comencé a recuperarme, me sentí obligado a expandir enormemente mis huertos de jardín y las cosas que plantaba, a pesar de que todavía estaba luchando física y mentalmente.
La experiencia parecía acelerar mi propia sanación. Se sentía como si el estar construyendo el jardín, me estuviera ayudando a volver a la vida. Un día mientras me paraba en la luz del sol de la tarde y miraba con asombro todo lo que había crecido, sentí que mi propia fuerza había regresado en el mismo período de tiempo.
Esta experiencia personal, junto con numerosos estudios sobre los efectos positivos del tiempo al aire libre, me hizo sentir curiosidad por explorar los muchos beneficios de la jardinería. Recientemente he discutido este tema en el podcast Think Act Be con el jardinero profesional Joe Lamp'l, creador de joe gardener®. Aquí hay 10 beneficios de la jardinería que surgieron de nuestra conversación:
1. Practicar la aceptación
La mayor parte de nuestro sufrimiento proviene de tratar de controlar cosas que no podemos. Cuanto más podamos aceptar los límites de nuestro control y la imprevisibilidad de la vida, más tranquilidad podremos encontrar, y la jardinería es una excelente manera de practicarlo. "Cada día es un recordatorio más de la madre naturaleza de que no tengo el control", dijo Lamp'l, lo que encuentra útil porque se autodefine como un "control freak".
Aprendí a practicar la aceptación en mi propio jardín cuando las primeras lechugas estaban listas para cosechar a mediados de abril. Tenía muchas ganas de pasar tiempo en el jardín con mi familia, pero cuando mis hijas de 4 y 8 años me preguntaron si podían ayudarme a cosechar la lechuga, no me entusiasmé. ¿Qué pasaría si "arruinaban" mi jardín cuidadosamente plantado? ¿Qué pasaría si rompían el tallo en lugar de una hoja?
Afortunadamente, me las arreglé para superarlo y darles la bienvenida al jardín incluso con la posibilidad de que pudieran romper algo. Me di cuenta de que un "jardín perfecto" podría terminar siendo un lugar bastante solitario, que no era mi idea de la perfección.
La aceptación en el jardín o en otro lugar no significa renunciar, por supuesto. Aportamos nuestros mejores esfuerzos a lo que podemos controlar, y dejamos ir el resto. Con la jardinería, eso significa "preparar el mejor ambiente que puedas hacer para tus plantas", dijo Lamp'l, y permitir que la naturaleza haga lo suyo. Tu jardín (como tu vida) está en manos más grandes que las tuyas.
2. Ir más allá del perfeccionismo
Si eres propenso al perfeccionismo, probablemente seas consciente de los costos. Tratar de hacer las cosas perfectas puede llevar a la frustración, la pérdida de plazos y oportunidades, y relaciones tensas. También puede llevar a no tratar de hacer algo, con una mentalidad de "¿por qué molestarse si no puede ser perfecto?"
Dada la falta de control que tenemos, la jardinería puede ser un buen antídoto para el perfeccionismo. No importa cuán cuidadosamente planifiques y hagas tu jardín, hay innumerables factores que no puedes predecir: invasiones de insectos, inclemencias del tiempo, roedores hambrientos. Hace años uno de nuestros vecinos tenía un hermoso jardín hasta que un residente vecino roció herbicida en un día ventoso, dañando muchas de las plantas vegetales de mi vecino.
La jardinería ofrece un suministro interminable de este tipo de "neutralizadores para el perfeccionismo", como los llamó Lamp'l. Confesó ser un perfeccionista y sabe de primera mano que "la búsqueda de la perfección es una pérdida de tiempo, especialmente en el jardín. ¡Así que no te molestes!"
3. Desarrollar una mentalidad de crecimiento
La incapacidad de hacer el jardín perfectamente es en realidad motivo de celebración. La psicóloga Carol Dweck desarrolló la distinción entre mentalidades "fijas" y "de crecimiento", y la jardinería es una gran oportunidad para desarrollar esta última. Con una mentalidad de crecimiento, asumimos que estamos aprendiendo constantemente. Cuando algo no funciona como esperábamos, lo vemos como una oportunidad de aprendizaje en lugar de como un "fracaso".
Incluso podemos esperar nuestros errores. "Me encanta cometer errores", dijo Lamp'l, "porque los veo como una oportunidad de aprender algo nuevo. A través de esos percances, puedes entender lo que pasó y por qué, y puedes tener el poder de relacionar ese aprendizaje con cosas nuevas". Así que más errores solo significan más aprendizaje y más crecimiento.
Ciertamente cometo muchos errores de jardinería y encuentro que una mentalidad de crecimiento es muy útil. Por ejemplo, esta temporada experimenté con un método de siembra que no hice muy bien y terminé con plantas que estaban superpobladas y casi imposibles de desenredar cuando llegó el momento de poner las plántulas en los lechos del jardín. Mi reacción inicial fue sentir estrés por la necesidad de "hacerlo de la manera correcta", y luego me di cuenta de que todo lo que tenía que hacer era hacerlo lo mejor que podía, y aprendería algo para mi plantación de otoño.
4. Conectar con otros
Pocas cosas aumentan nuestro bienestar como las buenas relaciones, y la jardinería ofrece amplias oportunidades para conectarse con los demás. Lamp'l señaló que "la jardinería es una de las mejores formas de conectar con extraños" y convertirse rápidamente en amigos "porque tenemos esa cosa de la jardinería en común".
He experimentado esa conexión rápida yo mismo al conocer a otras personas que hacen jardinería, y hay mucho de qué hablar, no solo los detalles de la jardinería, sino las conexiones emocionales y espirituales que podemos experimentar con nuestros jardines. "Es un esfuerzo colectivo", dijo Lamp'l, "y todos estamos mejor juntos cuando compartimos nuestras experiencias".
5. Conectarte a tu mundo
La jardinería proporciona una conexión no solo con otras personas, sino con nuestro mundo. Muchas personas sienten esa conexión de una manera visceral cuando comen alimentos que acaban de cosechar." Todos tenemos una conexión innata con la tierra", dijo Lamp'l, "y esa conexión se manifiesta cuando consumimos lo que vino de la tierra, que es de donde venimos y donde todos terminamos".
Tener un jardín realmente significa tener una relación con la parcela de tierra que estás cuidando. Desde que me he metido más en la jardinería he tenido que ser mucho más consciente de los elementos: las primeras y últimas heladas de la temporada, cuánta lluvia hemos tenido, la temperatura, dónde cae la luz solar durante todo el día. La jardinería también nos conecta íntimamente con el ciclo de las estaciones.
Y como Lamp'l describió, es fácil sentirse "como padre" de las plantas en crecimiento. "Nutres las semillas y haces todo lo que puedes por ellas", dijo,"y luego es como si estuvieras poniendo a tus bebés en el suelo", de la misma manera que podríamos nutrir a un niño pequeño que eventualmente se dirige a conocer el mundo. Lamp'l continuó. "Pongo mucho cuidado y emoción en el jardín".
6. Bañarse en verde
La expresión japonesa "shinrin-yoku" se puede traducir como "baño en el bosque", que captura muy bien la experiencia de estar inmerso en el verde. Un creciente cuerpo de investigación ha encontrado todo tipo de beneficios de estar en paisajes naturales.
Estos estudios han encontrado evidencia de que estar en lo verde, o incluso poder mirar un paisaje verde, está relacionado con una mejor recuperación de las cirugías, menos ansiedad y depresión, mejor manejo del estrés y muchos otros efectos positivos.
Lo bueno de un jardín es que puede estar justo en tu puerta trasera. Y mientras que podrías pasar el tiempo sentado en tu patio con la misma facilidad, es mucho más probable que estés al aire libre constantemente cuando el trabajo de un jardín lo requiere.
7. Estar presente
La presencia consciente está ligada a una larga lista de resultados positivos, como la satisfacción de la relación y menos reactividad emocional. El jardín puede ser un lugar protegido donde practicamos estar donde estamos y realmente hacer lo que estamos haciendo.
Lamp'l describió encontrar su "momento Zen" en su jardín, donde sintoniza con su experiencia. Por ejemplo, si bien generalmente te encanta escuchar podcasts, no lo haces cuando estás en el jardín. "Ese es un tiempo sagrado para mí", dijo. "Cuando estoy por ahí quitando la hierba, quiero escuchar a los pájaros. No quiero oír nada más. Es un momento tranquilo, y lo disfruto".
A menudo encuentro ese efecto centrado en mi propio jardín. Justo anoche, después de una fuerte lluvia, me senté en mi jardín a la luz del día y observaba lo que estaba a mi alrededor. Fue sorprendente lo rápido que sentí una sensación de relajación.
8. Ejercicio físico
Mover tu cuerpo regularmente es una manera efectiva de aumentar el estado de ánimo y reducir la ansiedad, y la jardinería ofrece "oportunidades para la actividad física", dijo Lamp'l. Incluso cuando no puedes ir al gimnasio constantemente, mantiene el tono muscular y se siente bien a través del trabajo diario en tu jardín.
Los movimientos también son variados, lo que puede significar menos lesiones por uso repetitivo en comparación con el ejercicio más estructurado. "Cuando quito la hierba, estoy sobre mi vientre, sobre mi trasero, acostado de lado, haciendo muchas cosas que probablemente haces en una clase de yoga", dijo. "Puedo renunciar a mi membresía del gimnasio".
9. Reducir el estrés
No es sorprendente que pasar tiempo en tu jardín pueda ser una excelente manera de liberar el estrés. Hay algo en sentir la vida a tu alrededor, el calor del sol, la tierra en tus manos. Mientras me siento en mi propio jardín estos días veo acelgas arco iris y lechugas temblando en el viento, arándanos, moras y fresas madurando, y siento la brisa mientras las nubes se mueven a través del cielo azul.
Solo no te olvides de pasar el tiempo simplemente siendo en tu jardín. Siempre hay algo por hacer, como Lamp'l señaló, así que tómate el tiempo deliberadamente para alejarte de la actividad y experimentar lo que está a tu alrededor.
10. Comer de forma saludable
Por último, pero no menos importante, un jardín puede producir los alimentos más frescos y saludables disponibles, los tipos de alimentos que puede tener un impacto significativo en nuestra salud mental. Por ejemplo, dos estudios mostraron que los cambios en la dieta pueden ser un tratamiento eficaz para la depresión.
Los estudios en esta área tienden a encontrar beneficios de la dieta "mediterránea" (y similar), que enfatiza el consumo de alimentos integrales mínimamente procesados, exactamente los tipos de alimentos que tu jardín producirá. Además, existe el beneficio adicional de saber que desempeñaste un papel en el cultivo de la comida.
Cómo empezar
¿Listo para comenzar un jardín propio? Aquí hay seis consejos rápidos que Lamp'l recomienda para principiantes.
- Solo empieza. Decide que vas a empezar, aunque no sepas cómo va a salir o incluso exactamente lo que estás haciendo. "Inténtalo, ¿y qué pasa si fallas?" preguntó Lamp'l. "Lo peor que puede suceder es que aprenderás algo. Y eso vale el precio de una planta, cada vez".
- Empieza despacio. Lamp'l señaló que es fácil emocionarse al comenzar y plantar demasiado, lo que termina siendo difícil de mantener. Como resultado, podrías terminar sintiéndote abrumado y desanimado. Así que empieza, pero no exageres. Siempre puedes hacer más en tu jardín con el tiempo. Un primer paso sencillo es cultivar algo en un contenedor que puedas poner cerca de tu casa, para que sea fácil cuidarlo y disfrutar viéndolo todos los días.
- Enfócate en un suelo sano. La jardinería exitosa comienza literalmente desde cero, según Lamp'l. "El suelo es vida. Cuando te enfocas en eso, suceden cosas buenas". Aconseja encarecidamente a quienes hacen jardinería que eviten los productos químicos sintéticos y "comiencen a alimentar el suelo con material orgánico". Eso puede incluir composta, lo "mejor que puedes agregar al suelo porque hay mucho en ella", y cualquier otra cosa que la naturaleza proporciona, como hojas trituradas, corteza triturada o estiércol envejecido.
- Cultiva lo que quieras. Elige frutas y verduras para cultivar según "lo que quieres comer o lo que te gusta mirar", aconsejó Lamp'l. "Cultiva algo que sea fácil y que crezca rápidamente, como un rábano o lechuga". La facilidad y la recompensa rápida serán la motivación para seguir con la jardinería.
- Conoce las necesidades de tus plantas. "Aprende algo sobre la planta antes de plantarla en la tierra", dijo Lamp'l. "Lee la etiqueta de la planta para saber si le gusta el sol o la sombra y si está húmeda o seca, y haz todo lo posible para darle el entorno en el que quiere prosperar". Después de todo, las plantas no pueden moverse por sí mismas, por lo que depende de nosotros "poner la planta correcta en el lugar correcto". Tus plantas te recompensarán por ello.
- Presta atención a tus plantas. Pasa al menos un poco de tiempo en tu jardín todos los días observando lo que está sucediendo. De esa manera, puedes "ser proactivo cuando surgen problemas y puedes evitar problemas potencialmente más grandes", dijo Lamp'l. Además, realmente no hay inconveniente en pasar tiempo en tu jardín, dados todos los beneficios discutidos aquí.
Crédito de la imagen: Joshua Resnick / Shutterstock
A version of this article originally appeared in English.
