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Verificado por Psychology Today

Para la mayoría de las personas, sería difícil imaginar una vida en la que la mente no descartara de forma rutinaria los detalles que una vez recordaba, desde hechos y cifras memorizados temporalmente hasta las características de personas y lugares en los que no se ha pensado en años. Un grado normal de olvido es un elemento central de la memoria, que permite a las personas prescindir de información que ya no tiene mucha utilidad.

Por supuesto, olvidar también causa problemas. Las fallas menores para recordar pueden ser inconvenientes a cualquier edad y pueden volverse más frecuentes y problemáticas más adelante en la vida. Los científicos han demostrado que la disminución de ciertos tipos de capacidad de memoria es una parte típica del envejecimiento y no refleja necesariamente el desarrollo de una afección médica como la enfermedad de Alzheimer. Los expertos han propuesto una variedad de tácticas para evitar el deterioro de la memoria y controlar los niveles típicos de pérdida de memoria.

Por qué olvidamos

Olvidar puede ser frustrante cuando uno se da cuenta, pero mucho de lo que la gente olvida se escapa silenciosamente de la memoria. Los expertos dicen que es una característica, no un error, de la forma en que funciona la memoria.

¿Olvidar tiene beneficios?

Muchos detalles y experiencias son más relevantes para nuestro futuro que otros, y recordar todo probablemente sería ineficaz. Olvidar puede ser útil para recordar, en el sentido de que los detalles menos útiles que se olvidan (como una contraseña antigua o un conjunto de instrucciones desactualizado) no interferirán con la recuperación de los útiles. Y olvidar los recuerdos desagradables o dolorosos, cuando uno puede hacerlo, puede hacer que uno se sienta mejor acerca de las experiencias pasadas y reducir la carga de las negativas.

¿Cuáles son algunas causas comunes de que olvidemos?

La información puede olvidarse porque uno no estaba prestando suficiente atención inicialmente o no ha reforzado el recuerdo de la información intentando recuperarla. Un recuerdo adquirido más recientemente puede interferir con la recuperación de uno anterior, como cuando uno aprende los nombres de más de una persona en sucesión. El estrés, la falta de sueño y ciertos comportamientos, como el consumo excesivo de alcohol, también pueden afectar temporalmente la memoria (causando un "desmayo" en el caso de la bebida).

El envejecimiento y el declive de la memoria

Es bien sabido que algunas formas de capacidad de memoria tienden a volverse menos nítidas a medida que pasan las décadas de la vida. Al igual que otras partes del cuerpo, el cerebro cambia con la edad, con las correspondientes diferencias en la capacidad de recordar información. Pero no todas las personas experimentan tales declives en la misma medida en que envejecen, y algunas formas de memoria, como la memoria para tareas físicas familiares, parecen en gran medida libres de obstáculos por la edad.

¿Es típico olvidar cosas conforme envejeces?

Hasta cierto punto, sí. Los cambios en la capacidad de recordar son normales, incluso en ausencia de demencia u otra afección, y la pérdida de memoria es una preocupación común entre los adultos mayores. Las disminuciones en ciertos tipos de memoria (como la memoria de trabajo y la memoria episódica) significan que una persona puede olvidar ocasionalmente la palabra que tenía la intención de decir o dónde dejó un objeto de uso frecuente. Otras formas de memoria, incluida la memoria semántica (conocimiento del mundo) y la memoria procedimental, parecen verse menos afectadas por el envejecimiento normal.

¿A qué edad empieza el declive de la memoria?

La capacidad de memoria, al menos para algunos tipos de memoria (como la memoria de trabajo), puede comenzar a declinar gradualmente a partir de los veinte o los treinta, con tendencias descendentes que se extienden hasta la edad adulta. Las investigaciones indican que la capacidad de memoria episódica (memoria de experiencias) tiende a disminuir después de los 60 años. Sin embargo, estos son promedios; para algunas personas, la memoria se conserva en mayor medida y durante más tiempo.

Preservando las habilidades de la memoria

¿Se puede proteger la memoria a medida que las personas envejecen? Si bien es posible que una persona no pueda prevenir por completo las disminuciones en la capacidad de memoria, los expertos han estudiado varias medidas que se pueden tomar para aumentar las probabilidades de mantener una memoria nítida en la vejez. También existen técnicas para solucionar problemas comunes de memoria si surgen.

¿Cuáles son algunas estrategias para preservar la capacidad de la memoria?

Adoptar aspectos de un estilo de vida que generalmente promueva la salud, como una dieta saludable, actividad física de rutina y dormir lo suficiente, puede ayudar a mantener la memoria a medida que uno envejece. También podemos jugar juegos cognitivamente desafiantes, como ajedrez, cartas y crucigramas, o ejercitar la mente de otras maneras.

¿Cómo puedo manejar la pérdida de memoria normal relacionada con la edad?

Reducir el estrés y dormir lo suficiente podría ser útil. Otras formas de compensar el olvido incluyen organizar objetos (como las llaves del auto) para que sus ubicaciones sean siempre las mismas, hacer un esfuerzo adicional para concentrarte al recibir información que debes recordar, minimizar las distracciones y usar ayudas simples para la memoria, como planificadores, calendarios, listas escritas y recordatorios. En algunos casos, puede valer la pena considerar medicamentos para mejorar la memoria.

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