Psicología Positiva
La psicología positiva explora lo que permite que los individuos y las sociedades florezcan. Examina cómo las personas pueden cultivar la felicidad, la fuerza y la resiliencia y, en última instancia, vivir una vida plena y significativa. En lugar de tratar de aliviar el sufrimiento, la psicología positiva se esfuerza por mejorar el bienestar. La psicología positiva es una disciplina relativamente nueva, pero ha crecido ampliamente desde su aparición.
La psicología positiva tiene como objetivo descubrir lo que les permite prosperar a los humanos, cosas como lograr un objetivo profesional, tener una relación amorosa o sentirse asombrados por la naturaleza. El campo tiene como objetivo proporcionar los ingredientes que todo el mundo puede utilizar para construir la vida más plena posible.
Los académicos de la psicología positiva creen que las partes buenas y malas de la vida son igualmente genuinas y que lo bueno no es la ausencia de lo malo, sino la presencia de bienestar y propósito. El objetivo no es ignorar el sufrimiento, sino establecer una mejor comprensión de lo que les permite florecer a los individuos.
Martin Seligman, un psicólogo de la Universidad de Pennsylvania, a él se le atribuye el lanzamiento del campo moderno de la psicología positiva. Seligman se convirtió en Presidente de la Asociación Americana de Psicología en 1998 y designó la psicología positiva como una pieza central de su mandato. Los psicólogos Mihaly Csikszentmihalyi, Christopher Peterson y otros también fueron pioneros.
Las ideas subyacentes a la psicología positiva se remontan a psicólogos humanistas como Abraham Maslow en la década de 1950. Pero el campo actual fue establecido por Martin Seligman en la década de 1990. Seligman y otros creían que la psicología se centraba demasiado en los trastornos y déficits, en lugar de las fortalezas que permiten a las personas llevar vidas felices, resilientes y significativas. Desde entonces, el campo ha ganado popularidad y un gran número de seguidores.
Martin Seligman desarrolló la teoría PERMA del bienestar para articular los cinco elementos que permiten que las personas florezcan. Estas son: las emociones positivas, el compromiso, las relaciones, el significado y el logro. Cultivar estos bloques de construcción de una buena vida puede ayudarles a prosperar a las personas.
Los tres pilares de la Psicología Positiva son las experiencias positivas, los rasgos individuales positivos y las instituciones positivas. Las experiencias abarcan las emociones, los rasgos individuales se refieren a fortalezas únicas como la creatividad y el valor, y las instituciones representan elementos de la comunidad, como la crianza de los hijos y el liderazgo.
En este terreno han surgido ideas importantes. Por ejemplo, la felicidad causa, (en lugar de ser el resultado de), muchos resultados positivos, como las relaciones y el éxito profesional. La felicidad, la fuerza y las relaciones pueden amortiguar las decepciones. Después de cierto punto, el dinero no puede comprar la felicidad, a menos que se gaste en otras personas.
La investigación en la psicología positiva ha revelado lo que realmente aumenta el bienestar, como las relaciones sólidas, el trabajo atractivo, la gratitud, la bondad, la atención plena y el propósito. Tomarse el tiempo para cultivar estos rasgos y comportamientos, y hacerlo de manera consistente, puede ayudar a fomentar la felicidad a diario.
Puedes llevar un diario de gratitud para tener una perspectiva equilibrada. Puedes practicar atención plena para una sensación de calma y apreciación del momento presente. Puedes catalogar actos de bondad y generosidad. Y puedes cultivar una mentalidad optim
Las intervenciones de Psicología Positiva son comportamientos simples para mejorar el bienestar, y la investigación muestra que son efectivos. El ejercicio de escribir tres cosas por las que estás agradecido y el ejercicio de contar gestos amables aumentan la felicidad.
El significado y el propósito aumentan el bienestar con respecto a la felicidad, la satisfacción con la vida, la autoestima y el procesamiento emocional. También están asociados con una mejor salud mental y física. Las relaciones fuertes con los padres, los servicios religiosos y el voluntariado son algunos de los factores que aportan significado y propósito a la vida.
Entrénate para cambiar tu atención de lo negativo y toma tiempo para enfocarte en lo positivo. También puedes practicar la gratitud, disfrutar los pequeños momentos y emociones, y evitar disminuir tus éxitos o involucrarte en un esquema de pensamiento de todo o nada.