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Verificado por Psychology Today

Creatividad

La creatividad está en las cosas pequeñas

La creatividad puede ser parte del día a día con un enfoque en ideas pequeñas.

Los puntos clave

  • La creatividad funciona mejor cuando la atención se centra en pequeñas ideas.
  • Un poco de esfuerzo creativo todos los días puede marcar una gran diferencia.
  • Las personas pueden cambiar de una mentalidad fija a una de crecimiento con pequeños actos de creatividad.

A menudo tenemos la idea errónea de que una idea creativa es una gran idea. Por ejemplo, la invención del vuelo tripulado, la cura para la poliomielitis, la creación de la World Wide Web y el desarrollo de una vacuna para COVID-19. Es cierto que esos son conceptos creativos enormes, pero la verdadera creatividad se basa en un principio de pequeños descubrimientos: los pequeños tesoros que encontramos cuando imaginamos la creatividad como "buscar lo pequeño, no solo lo grande".

Descubrir un sinónimo de "dicho" en la novela que estamos escribiendo. Mezclar tres colores para la puesta de sol en una pintura de paisaje en la que estamos trabajando. Comprar una corbata nueva, no porque esté de moda, sino porque es "genial". Descubrir que se puede usar un clip para papel para reparar un juguete roto. Buscar pequeños actos de creatividad es tan significativo (si no más) que los grandes proyectos creativos. Muchos pequeños actos creativos nos acostumbran a hacer de la creatividad una parte normal y natural de nuestra vida diaria en lugar de un evento que ocurre en raras ocasiones.

Stephen Guise, en su libro Mini Habits: Smaller Habits, Bigger Results, defiende el poder de los pequeños hábitos en lugar de nuestra excesiva dependencia de los grandes, poderosos y, a menudo, pesados hábitos. Hace un punto válido cuando dice: "Las grandes intenciones no valen nada si no producen resultados". Por ejemplo, podemos hacer una resolución para perder 20 kilos este año, pero a menudo nos damos por vencidos (más temprano que tarde) porque la meta percibida era demasiado grande. Guise afirma enfáticamente que la mayoría de las personas "tienen grandes ambiciones, pero sobreestiman su capacidad para hacer lo que sea necesario para cambiar".

chenspec/Pixabay
chenspec/Pixabay

La creatividad como actividad diaria

Al principio del libro, Guise hace dos puntos claros y penetrantes: "1) Hacer un poco es infinitamente más grande y mejor que no hacer nada, y 2) hacer un poco todos los días tiene un impacto mayor que hacer mucho en un día". Ahora, pongámoslo en términos de nuestra creatividad personal: 1) Buscar una pequeña pieza de creatividad es mejor que no hacer nada en absoluto, y 2) buscar una pequeña cosa (creativa) todos los días es mucho más efectivo y práctico que tratar de generar una idea muy grande de vez en cuando. El punto es claro: la determinación de hacer de la creatividad una parte regular y normal de nuestras actividades diarias prepara nuestras mentes para estar listas para esos momentos en los que necesitamos una idea realmente grande en nuestro trabajo o en nuestra vida cotidiana.

Lo mismo es cierto para nuestros hijos. Cuando les ofrecemos oportunidades para hacer de la creatividad una parte regular de su desarrollo y educación, enviamos una señal poderosa de que la creatividad no solo ocurre de vez en cuando, sino que puede ser una parte normal (incluso diaria) de nuestro funcionamiento intelectual.

Es importante tener en cuenta que la filosofía de la creatividad de las "pequeñas cosas" es un abrazo apasionado de la mentalidad de crecimiento, una forma que tenemos de romper las fuerzas educativas, culturales y personales que con frecuencia sofocan nuestros impulsos creativos. Por el contrario, aquellos con una mentalidad fija a menudo pierden todas las pequeñas ideas. Frustrados por su incapacidad para localizar grandes ideas (a menudo pocas y distantes entre sí), se retiran a la zona de "simplemente no soy creativo" y, en consecuencia, languidecen en un estado permanente de prácticas y creencias serias. Sin embargo, los investigadores han descubierto que la transición de una mentalidad de una mentalidad (fija) de "simplemente no soy creativo" a una de (crecimiento) "estoy trabajando para ser más creativo" implica un compromiso continuo con la mejora. No importa la cantidad o la intensidad de los factores de por vida que han deprimido nuestro espíritu creativo natural, siempre se pueden superar.

Con pequeños pasos.

Este compromiso, una serie continua de pequeños cambios, bien puede ser una de las características más definitorias de una vida creativa. Descubrir un nuevo camino a casa desde el trabajo que evite el atasco de tráfico habitual de las 5:00 p. m., mejorar tu receta favorita con la adición de una cucharadita de chile en polvo, ayudar a tu hijo a descubrir una forma interesante de multiplicar números de dos dígitos, agregar plantas hosta al perímetro de tu jardín para darle más verde y ponerte un nuevo par de aretes plateados para complementar un atuendo nuevo igualmente deslumbrante son innovadores. Es cierto, no ganarás ningún premio Nobel ni pondrán tu cara en la portada de TIME , pero no son menos creativos.

A version of this article originally appeared in English.

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Acerca de
Anthony D. Fredericks Ed.D.

Anthony D. Fredericks, Doctor en Educación, es Profesor Emérito en Educación en el York College de Pensilvania y autor de From Fizzle to Sizzle: The Hidden Forces Crushing Your Creativity y de How You Can Overcome Them.

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