Sexo
Hombres heterosexuales que tienen sexo con otros hombres: en sus propias palabras
¿Cómo explican su conducta los hombres heterosexuales que tienen sexo con otros hombres?
9 de septiembre de 2020 Revisado por Lybi Ma
En otra publicación describía una población de hombres que se consideran heterosexuales, no se etiquetan como homosexuales o bisexuales, que evitan participar con la comunidad LGBT, que a menudo están casados o en una relación sentimental con una pareja del sexo opuesto, y que participan en sexo con hombres o expresan el deseo de hacerlo. La investigación con esta población es difícil debido a los desafíos de llegar a estos hombres, la mayoría de los cuales mantienen esta actividad encubierta. Recordemos de la publicación anterior que los hombres heterosexuales que tienen relaciones sexuales con otros hombres generalmente no comparten detalles sobre su actividad sexual con el mismo sexo o el deseo de hacerlo con otras personas significativas en sus vidas.
Debido en gran parte a la popularización del tema en el libro más vendido de 2005 On the Down Low: A Journey into the Lives of 'Straight' Black Men Who Sleep with Men,[i] los hombres latinos y afroamericanos son los sujetos principales en la investigación con hombres que no se identifican como gays. La existencia de hombres blancos que se involucran en el mismo comportamiento es incuestionable, pero generalmente se ha eludido (a pesar de que nuestra base de conocimientos existente sobre hombres bisexuales, en general, se basa en la experiencia masculina de hombres blancos).[ii]]
Uno de los primeros estudios, "El proyecto de investigación sobre el apego bisexual y no gay" de principios de la década de 1990, encontró que los sujetos que participan en un comportamiento sexual entre personas del mismo sexo pero que no se identifican como homosexuales o bisexuales se describen a sí mismos como "kinky", "normales" o "solo un chico."[iii] Un estudio de 2010 mucho más reciente consistió en entrevistas con hombres identificados como heterosexuales que habían participado en actividad sexual con otro hombre en el año anterior; los participantes no consideraron esta actividad como discrepante con su identidad. La actividad sexual del mismo sexo no requirió una reconsideración de la identidad sexual por cuatro razones:
- La actividad fue poco frecuente
- El sexo fue visto como recreativo o un deporte; los hombres se involucraron en actividad sexual con personas de su mismo sexo por la actividad física o para aliviar el estrés
- El sexo como una necesidad económica; casi la mitad de los participantes se involucraron en sexo con otros hombres por dinero, y la mayoría de los que informaron esto eran consumidores de sustancias
- El sexo como un accidente; los participantes declararon que la actividad sexual no fue su culpa o que estuvo más allá de su control personal, tales como la embriaguez o un resultado no planificado de una discusión con una esposa o pareja romántica femenina.
Además, mientras participaban en el comportamiento sexual, los sujetos evitaron besarse, abrazarse, hablar con el otro varón (o incluso mirarlo) y se fueron inmediatamente después del sexo.[iv]
Se encontraron hallazgos similares a lo largo de una serie de entrevistas con hombres que tenían sexo con otros hombres que no se identificabn como homosexuales preparadas para los Centros de Control y Prevención de Enfermedades en 2004. Estos hombres determinaron que la actividad sexual entre personas del mismo sexo no cuestionaba su identidad heterosexual porque:[v]
- Había poco o ningún vínculo emocional
- No había pretensión de compromiso entre los participantes
- La actividad fue poco frecuente en comparación con la actividad sexual con mujeres
Para tomar en cuenta, los hombres entrevistados informaron que si la actividad sexual entre los hombres era anónima, experimental, ocasional, o si el uso de sustancias estaba involucrado, el acto no era “gay”.
Finalmente, si bien hay datos contradictorios, parece que los hombres que tienen sexo con otros y no se identifican como homosexuales participan en altos niveles de consumo de drogas y alcohol.[vi] Muchos de hecho participan en actividades sexuales con otros hombres como un medio para obtener recursos financieros para adquirir tales sustancias. Otros estudios elaboran aún más las muchas razones por las que estos hombres usan sustancias, incluyendo:[vii]
- El uso de sustancias conduce a la desinhibición
- El uso de sustancias se usa retrospectivamente para racionalizar o justificar la participación en este comportamiento
- El uso de sustancias actúa como un facilitador al permitir una mayor comodidad al acercarse a otro hombre para la actividad sexual
- El uso de sustancias intensifica la experiencia sexual
Como lo demuestra la investigación anterior, tenemos una mejor comprensión de las experiencias vividas de hombres teniendo sexo con otros hombres en comparación con hace una década. Sin embargo, la etiología de este comportamiento sigue siendo polémica, y la publicación final en esta serie de blogs examinará las explicaciones etiológicas propuestas para este grupo demográfico. El concepto de hombres heterosexuales que tienen sexo con hombres desafía lo tradicional y para muchos la creencia inflexible de que el comportamiento sexual es indicativo de identidad. Usando esta estenosis como guía, un hombre que tiene relaciones sexuales con otro hombre debe ser gay (o bisexual al menos). Pero, ¿y si los hombres en cuestión se identifican como heterosexuales? ¿Están mintiendo? ¿Están confundidos? Recordemos de la primera publicación que los investigadores piden cada vez más que los estudios incluyan una descripción completa de la sexualidad, una que abarque la autoidentificación, los patrones de excitación y el comportamiento. Muy posiblemente, esta confluencia de factores ofrece la mejor elucidación etiológica de esta demografía.
A version of this article originally appeared in English.