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Verificado por Psychology Today

Culpa

5 maneras de lidiar con una mamá que manipula mediante la culpa

Puede que no seas el problema, pero podrías ser la solución.

  • “No importa lo que haga por ella; nunca es suficiente."
  • "Le compré a mi mamá un regalo precioso por su cumpleaños, pero lo regresó. Siempre regresa mis regalas, ¿qué le pasa?"
  • "Odio el día de las madres, nunca lo hago bien."
  • “Los sentimientos de mi mamá siempre están lastimados. ¿Por qué no aprecia lo mucho que me esfuerzo?"
Iakov Filimonov/Shutterstock
Fuente: Iakov Filimonov/Shutterstock

Las madres que provocan culpa están en todas partes. Si tienes una, probablemente reaccionas con enojo, frustración, tristeza, dolor y culpa, o alguna mezcla común de todas esas emociones.

Si te sientes culpable por no ser "lo suficientemente bueno" con tu madre, o enojado con ella por "hacerte" sentir culpable, es muy probable que tu madre también se sienta culpable. Aunque probablemente no lo muestren directamente, los psiconalistas han sugerido a través de los años que quienes provocan culpa suelen sentirla en ellos mismos.

¿Por qué pasa esto?

Una de las razones más importantes podría ser que la culpa es una emoción dolorosa. Definida como culpabilidad real ("el hecho de haber cometido alguna ofensa, crimen, violación o mal") o "un sentimiento de responsabilidad o remordimiento por alguna ofensa, crimen, mal, etc., ya sea real o imaginario," la culpa es un sentimiento que la mayoría de nosotros odia y se esfuerza por eliminar. Esa es una de las razones por la que es una herramienta tan poderosa para obligar a alguien a hacer lo que queremos que haga. También es una de las razones por las que a la mayoría de nosotros nos desagrada la gente que intenta hacernos sentir culpables. (En años recientes, los psicoanalistas han dejado de enfocarse tanto en la culpa para enfocarse más en su prima, la vergüenza).

Los psicoanalistas tempranos entendían que la culpa inconsciente o no reconocida era lo que impulsaba gran parte del comportamiento neurótico. Freud y Melanie Klein creían que tanto la ansiedad sobre los deseos agresivos normales hacia los padres, como el deseo de deshacerse de uno de ellos para ser la persona más importante en la vida del padre o madre restante, podría crear culpa en niños pequeños que, de no resolverse , podría impactar en su salud mental por el resto de su vida. Ya sea consciente o inconsciente, la culpa es un factor importante en nuestras vidas.

La culpa no es un sentimiento agradable. Intentamos evitarla: cuando no podemos, intentamos deshacernos de ella, a veces lo hacemos intentando echarle la culpa a los demás mediante la acción psicológica conocida como "proyección". "No necesito sentirme así; ella sí," decimos. La psicoanalista estadounidense Jody Davies le llama a esto el sentimiento de "la papa caliente", si un sentimiento es demasiado doloroso como para conservarlo, se lo pasamos a alguien más.

Cuando no podemos pasarle la emoción negativa a alguien más, solemos enojarnos con la persona que parece determinada a hacernos sentirla. "No es mi culpa, es tuya", o "no soy el malo, ¡tú eres!" pensamos (incluso si no lo verbalizamos).

Si tu madre está intentando hacerte sentir culpable, parte de su comportamiento podría estar siendo impulsado por sus propios sentimientos de culpa no reconocidos y sin resolver. ¿Deberías acusarla la próxima vez que ocurra un conflicto entre ustedes dos? Probablemente no. Pero estar consciente de la posibilidad podría ayudarte a manejar mejor el conflicto.

Lo que ella, y todos los que luchamos contra sentimientos de culpa, en realidad queremos es ser perdonados, saber que no somos completamente malos. Pero, con frecuencia terminamos obteniendo completamente lo contrario. Tu madre "provocadora de culpa" en realidad podría solo querer que creas que es una buena persona, así como quieres que ella te haga saber que eres bueno. Podría ansiar escuchar que sus hijos la quieren, incluso mientras te aleja a ti y a tus hermanos con su enojo y culpa.

Los actos que la llevan a provocar de culpa probablemente no tienen absolutamente nada que ver contigo. Tal vez se traten de impulsos (no comportamientos reales) que sentía hacia sus propios padres o hermanos cuando era una niña. Tal vez quiere saber que no era una hija hiriente, enojada o mala. Tal vez secreta o inconscientemente siente que es una mala persona. O incluso podría sí tratarse de ti, indirectamente, si en ocasiones te odiaba cuando eras un bebé llorón y enfermizo. (Las madres a veces odian a sus bebés, y, según D.W. Winnicott, estos sentimientos no solamente son normales, sino que en dosis moderadas son una parte saludable de la maternidad).

Ya que no puede pedirlo directamente, puede que use la culpa para empujarte a que le des lo que quiere. Por supuesto que eso no funciona y logra exactamente lo contrario. Probablemente te deje sintiéndote enojado, crítico, frío y sin amor hacia ella.

¿Qué pasaría si en lugar de reaccionar al significado superficial de las palabras de tu madre, asumieras que está luchando contra la culpa? ¿Qué pasaría si en lugar de enojarte cuando te critica, de atacarla de vuelta, de darle un regalo sin significado o de decirle cosas amables que ni siquiera crees, intentaras responder a su culpa subyacente?

¿Cómo lo harías?

Estas son cinco sugerencias sencillas. Podrías empezar intentando solo una. A veces, un pequeño cambio en tus interacciones habituales puede llevar a nuevas maneras de estar juntos, sin que se tenga que pedir una sola disculpa.

  1. Dile algo positivo a tu madre sobre su manera de criarte.

    Tiene que ser algo que sea cierto y que de verdad admires o disfrutes. Puede ser algo que siempre diste por sentado o en lo que nunca habías pensado o que descubras que haces con tus propios hijos. Por ejemplo, podrías decir, "mamá, hoy estuve pensando en ti cuando los niños se sentaron a ver la TV. A mí siempre me encantó que te sentaras con nosotros cuando veíamos caricaturas los domingos por la mañana e intento hacerlo yo también con los niños al menos una vez por semana. Es tan agradable pasar un tiempo de relajación todos juntos."

  2. Intenta ponerte en su lugar y respóndele con base en eso.

    Por ejemplo, si te quedas en casa por el Día de la Madre para pasarlo con tus propios hijos o si vas a ir a ver a la mamá de tu pareja en lugar de a la tuya, podrías intentar decir, "sé que esto es difícil para ti mamá, y solo quiero que sepas que te amo. Lamento no poder estar en dos lugares a la vez." Si es verdad, podrías añadir, "y fuiste una mamá excelente de muchas formas, no quiero que pienses que el que no esté contigo significa que no fuiste una buena mamá."

  3. Presta atención a tus propios deseos de deshacerte de los sentimientos de culpa.

    ¿Será posible que tu mamá y tú estén jugando a la papa caliente con la culpa? ¿Estás intentando pasarle tus sentimientos negativos a ella? Si es así, intenta evaluar honestamente lo que podría estarte haciendo sentir culpable. Todos hacemos cosas que quisiéramos no haber hecho de vez en cuando. ¿Qué puedes hacer para corregirlo? ¿Hay algo que necesites perdonarte? ¿Hay algo que puedas simplemente dejar ir? Gestionar tu propia culpa facilitará que dejes de echárselo a tu madre cuando intente pasarte su propia culpa a ti.

  4. Considera tus propias necesidades y las necesidades de las demás personas en tu vida.

    Pero no se las embarres en la cara a tu mamá. En este momento puede estar pensando solo en sus necesidades, pero en cierto punto, podría respetarte por haber cuidado de ti misma y de las demás personas que amas sin hacerla sentir como una persona egoísta o malvada por querer que la atiendas a ella en lugar de a los demás.

  5. Evita insultar.
    El término "egoísta" ha recibido una carga tan grande en nuestra cultura que es mejor mantenerlo completamente fuera de la conversación. Si surge, no de tu propia boca, por supuesto, recuerda que es saludable atender tus propias necesidades. Probablemente, tanto tú como tu mamá están intentando atender su propio bienestar. Es una lástima que no puedan hacerlo juntas y al mismo tiempo satisfacer algunas necesidades de la otra, pero si no se puede, eso no necesariamente significa que ellas sea una mala madre, que tú seas una mala hija, o que alguna de las dos sea una mala persona.

Si intentas alguna de estas técnicas, por favor cuéntame cómo resultó. También me encantaría saber si intentas alguna otra cosa para lidiar con tus propios sentimientos de culpa.

Derechos de autor fdbarth@2015

A version of this article originally appeared in English.

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Acerca de
F. Diane Barth L.C.S.W.

F. Diane Barth, Trabajadora Social con Licencia es psicoterapeuta, profesora y autora con práctica privada en la ciudad de Nueva York.

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