Las diferencias entre los psicópatas y los sociópatas

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¿Distinguir entre un sociópata y un psicópata parece difícil? Sí y le pasa a muchas personas. Muchos psiquiatras, psicólogos forenses, criminólogos y agentes de policía usan los términos sociópata y psicópata indistintamente, de manera equivocada. Los principales expertos también discrepan sobre las diferencias significativas entre las dos afecciones y aquellos que están de acuerdo en que suele haber diferencias no están de acuerdo en cuáles son esas diferencias. En este artículo sostengo que hay diferencias claras y significativas.

La quinta edición del Manual de estadística y diagnóstico de los trastornos mentales (DSM-5), publicado por la American Psychiatric Association en 2013, enumera tanto la sociopatía como la psicopatía en el título de Trastornos antisociales de la personalidad (ASPD). Estos trastornos comparten muchos rasgos comunes de comportamiento, lo que lleva a parte de la confusión. Los rasgos clave que los sociópatas y los psicópatas comparten incluyen:

• La indiferencia por las leyes y las actividades sociales
• La indiferencia por los derechos de los demás
• No sentir remordimiento o culpa
• Una tendencia a mostrar un comportamiento violento o agresivo

Además de sus puntos en común, los sociópatas y los psicópatas también tienen sus propias características y orígenes particulares para sus comportamientos.

Los sociópatas tienden a estar nerviosos constantemente y a agitarse fácilmente. Son volátiles y propensos a tener arrebatos emocionales, incluidos los ataques de ira. Es más probable que no tengan educación y vivan en los sectores marginales de la sociedad a diferencia de los psicópatas. En ocasiones, son incapaces de mantener un trabajo estable o permanecer en un solo lugar durante mucho tiempo. A los sociópatas frecuentemente se les dificulta formar vínculos con los demás, aunque no es totalmente imposible.

Muchos sociópatas son capaces de formar un vínculo con un individuo o un grupo en particular, aunque no tienen ningún respeto por la sociedad o sus reglas en general. Por lo tanto, los vínculos significativos de cualquier sociópata serán pocos en número y de alcance limitado. Por regla general, tendrán problemas con las relaciones.

Ante los ojos de los demás, los sociópatas generalmente parecen estar perturbados o erráticos. Cualquier crimen que cometan, incluido el asesinato, tenderá a ser aleatorio y espontáneo en lugar de planeado. Debido a su comportamiento aparentemente errático, los sociópatas son más fáciles de identificar tanto para los profesionales como para los no profesionales en comparación con los psicópatas.

A diferencia de los sociópatas, los psicópatas son incapaces de formar vínculos emocionales. Los psicópatas tienden a ser agresivos y depredadores por naturaleza. Ven a los demás como objetos para su diversión. Aunque carecen de empatía, los psicópatas suelen tener personalidades encantadoras o incluso cautivadoras. Son manipuladores y pueden ganar fácilmente la confianza de la gente. Aprenden a imitar las emociones, a pesar de su incapacidad para sentirlas realmente y parecerán normales ante personas desprevenidas. Los psicópatas suelen ser bien educados y tener empleos estables.

Algunos psicópatas son tan buenos en la manipulación y la imitación que tienen familias y otras relaciones a largo plazo sin que los que los rodean sospechen de su verdadera naturaleza. Al cometer crímenes, los psicópatas planifican cuidadosamente cada detalle con anticipación y suelen tener planes de contingencia en su lugar. Parecerán serenos en una crisis.

A diferencia de sus contrapartes sociópatas, los criminales psicópatas son tranquilos, calmados y meticulosos. Desde el punto de vista de los cuerpos policiales, la naturaleza “a sangre fría” de los psicópatas los convierte en criminales muy eficaces. Como tal, generalmente son más difíciles de identificar que los sociópatas. Desafortunadamente, puede ser difícil saber cuándo estamos en la mira de un depredador psicópata.

Desde el punto de vista de diagnóstico, la etiología o la causa de la psicopatía es diferente de la sociopatía. Sostengo que la psicopatía es el resultado de la “naturaleza” (genética), mientras que la sociopatía es el resultado de la “crianza” (entorno). La psicopatía está relacionada con un defecto fisiológico que provoca el subdesarrollo de la parte del cerebro responsable del control de impulsos y las emociones (1).

La sociopatía, por otro lado, es más probable que sea el producto de un trauma infantil y un abuso físico o emocional. Debido a que la sociópata parece aprenderse en lugar de ser innata, los sociópatas son capaces de sentir empatía en ciertas circunstancias y con ciertos individuos, pero no con otros.

En última instancia, la psicopatía es más rara que la sociopatía y se considera que es el más peligroso de los trastornos antisociales de la personalidad. No es de extrañar que muchos asesinos en serie, incluidos Ted Bundy, Dennis Rader (BTK) y John Wayne Gacy, hayan sido psicópatas sin remordimientos. De hecho, se estima que casi el 50 por ciento de todos los asesinos en serie son psicópatas.

En una publicación separada, examino nuestra curiosa fascinación por los asesinos en serie de hecho y de ficción.