¿Por qué no puedo superar a mi ex?

Source: Darlene Lancer

El rechazo y las rupturas siempre son difíciles, pero algunos de nosotros tenemos más dificultades para dejar ir, incluso cuando la relación era abusiva. Si tenemos baja autoestima, las rupturas nos afectan más que a las personas que son más seguras y confiadas. Esto se debe a que las rupturas pueden desencadenar un dolor oculto y causar culpa irracional, ira, vergüenza y miedo.

Trabajar a través de los siguientes problemas puede ayudarte a dejar ir y seguir adelante. Muchos de estos problemas son ciertos para los codependientes:

• Si te culpas a ti mismo o a tu pareja.
• Si tienes baja autoestima (por lo que el rechazo desencadena vergüenza).
• Si las relaciones son de importancia primaria para ti.
• Si tienes un estilo de apego inseguro.
• Si temes que esta relación sea la última.
• Si no has atravesado el duelo de pérdidas anteriores.
• Si has tenido depresión.
• Si se desencadenan las pérdidas y traumas de tu infancia .

Culpar

Uno de los principales síntomas de la codependencia son los malos límites. Los codependientes tienen dificultades para ver a los demás como individuos separados, con sentimientos, necesidades y motivaciones independientes de sí mismos. Se sienten responsables y culpables por los sentimientos y acciones de los demás. A veces proyectan culpa cuando se sienten culpables o avergonzados.

La necesidad de tomar espacio de una persona o incluso de romper es probable que no sea una consecuencia de tu comportamiento, y ser culpado no lo hace cierto. Puede haber casos en los que la adicción, el abuso o la infidelidad de una persona precipiten una ruptura. Esos comportamientos reflejan las motivaciones individuales y son parte de un panorama más amplio de por qué la relación no funcionó.

Nadie es responsable de las acciones de otra persona. La gente siempre tiene la opción de hacer lo que hace.

La ira y el resentimiento también pueden mantenerte atrapado en el pasado. Los codependientes culpan a los demás porque tienen problemas para asumir la responsabilidad de su propio comportamiento, incluida la incapacidad de pedir que se satisfagan sus necesidades y establecer límites. Pueden haber sido culpados o criticados cuando eran niños, y la culpa es una defensa aprendida para avergonzar que se siente natural y los protege de su sentido de culpa demasiado desarrollado.

Baja autoestima y vergüenza

La vergüenza es una causa subyacente de la codependencia derivada de la crianza temprana y disfuncional. Los codependientes desarrollan la creencia de que son básicamente defectuosos en algunos aspectos y que no son amados. Los niños pueden interpretar el comportamiento de los padres como rechazo y vergüenza cuando no está destinado a ser. Incluso los padres que profesan su amor pueden comportarse alternativamente de maneras que comuniquen que no eres amado como el individuo especial que eres.

La vergüenza a menudo es inconsciente, pero puede conducir a una persona a amar a otros que no pueden amar o que no los aman. De esta manera, una creencia en la falta de amor de uno se convierte en una profecía autocumplida que opera bajo la consciencia consciente. Podemos quedar atrapados en un ciclo negativo de abandono.

Algunos codependientes tienen un guion de vergüenza, "soy defectuoso" o "soy un fracaso", culpándose a sí mismos por cualquier cosa que salga mal. La baja autoestima, que es una autoevaluación cognitiva, conduce a la auto-atribución de fallas y defectos personales para explicar por qué otra persona quiere terminar una relación. Por ejemplo, si un hombre engaña, la mujer a menudo asume que es porque no es lo suficientemente deseable, en lugar de que su motivación proviene de su miedo a la intimidad.

La vergüenza puede llevar a la depresión. Aprender a amarte a ti mismo puede curar la vergüenza y mejorar la autoestima.

Las relaciones son la respuesta

En el ambiente familiar disfuncional e inseguro en el que crecen los codependientes, desarrollan estrategias y defensas para sentirse seguros y amados. Algunos buscan el poder, otros se retiran, y otros tratan de ganar el amor de sus padres adaptándose a las necesidades de sus padres.

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Los codependientes estereotipados siguen tratando de hacer que las relaciones funcionen, generalmente más que su pareja, para sentirse seguros y bien consigo mismos. Una relación cercana se convierte en la solución a su vacío interior e inseguridad.

No es inusual que los codependientes abandonen a sus amigos, intereses y pasatiempos, si los tenían, una vez que están en una relación. Centran toda su energía en la relación y en su ser querido, lo que no ayuda ni a ellos ni a la relación. Algunas parejas pasan su tiempo hablando de su relación, en lugar de disfrutar del tiempo juntos. Una vez que termina, sienten el vacío de su vida sin pareja. El adagio, "la felicidad comienza dentro", es apropiado.

Algunas personas intencionalmente permanecen conectadas con su ex en las redes sociales, tocan su canción especial, miran fotos de su ex. Esto puede ser natural en las primeras etapas de una ruptura, pero después de eso, puede ser una forma imaginaria de mantenerse conectado. Sin embargo, definitivamente prolonga el dejar ir y la recuperación.

La recuperación de la codependencia ayuda a las personas a asumir la responsabilidad de su propia felicidad, y aunque una relación puede sumar a tu vida, no te hará feliz a largo plazo, si no puedes lograrlo por tu cuenta. Es importante tener una red de apoyo de amigos y/o reuniones de 12 Pasos, así como actividades que te brinden placer, ya sea que estés o no en una relación.

La última esperanza

Perder a alguien puede ser devastador porque los codependientes le dan mucha importancia a una relación para hacerlos felices.

El miedo es la consecuencia natural de la vergüenza. Cuando estás avergonzado, temes que no serás aceptado y amado. Temes la crítica y el rechazo. Los codependientes temen estar solos y abandonados, porque creen que no son dignos de amor. Pueden aferrarse a una relación abusiva en la que están siendo emocionalmente abandonados todo el tiempo.

Estos no son miedos racionales. Construir una vida que disfrutes te prepara para vivir solo y estar en una relación más saludable donde dependas menos de la otra persona para hacerte feliz.

Lamentando el pasado

A los codependientes les resulta difícil dejar ir porque no han dejado ir la esperanza de la infancia de tener ese amor perfecto de sus padres. Esperan ser cuidados y amados y aceptados incondicionalmente por su pareja de la manera que deseaban que sus padres pudieran haberlo hecho.

Ninguna pareja puede compensar esas pérdidas y decepciones. Los padres no son perfectos e incluso aquellos con las mejores intenciones decepcionan a sus hijos. Parte de convertirse en un adulto independiente es darse cuenta y aceptar este hecho, no solo intelectualmente, sino emocionalmente, y eso generalmente implica tristeza y a veces ira.

Trauma pasado

Es un axioma psicológico que cada pérdida recapitula las pérdidas anteriores. Es posible que hayas tenido otras pérdidas como adulto que agravan el dolor por el actual. Una vez que has tenido depresión, eres más vulnerable a la depresión por segunda o tercera vez. Asegúrate de buscar ayuda profesional, ya que la depresión puede retrasar la sanación.

Sin embargo, a menudo, son las pérdidas de abandono de la infancia las que se desencadenan. La cercanía con uno de los padres era feliz, o puede que nunca la tuviste, o no de forma consistente. La intimidad de una relación cercana te recuerda la intimidad que una vez tuviste o anhelaste con tu madre o padre. De cualquier manera, es una pérdida.

Los codependientes pueden haber sido descuidados, culpados, abusados, traicionados o rechazados en la infancia, y estos traumas se reactivan por los acontecimientos actuales. A veces, inconscientemente provocan situaciones que recuerdan su pasado para que pueda ser sanado. También pueden percibir incorrectamente el rechazo, porque esperan ser tratados de la manera en que fueron anteriormente.

Nuestro pasado también determina nuestro estilo de apego. Si tenemos un estilo de apego seguro y saludable (inusual para los codependientes), somos más resistentes y capaces de recuperarnos más rápidamente.

Conclusión

El dolor es parte de dejar ir, pero es importante mantener amistades y actividades que afirmen la vida en el proceso. La vergüenza y la culpa no son útiles, pero trabajar a través del trauma del pasado puede ayudarte a resolver tus sentimientos y saber lo que sientes sobre el final de la relación presente. ¿Echas de menos a la persona, lo que representa, o simplemente estar en una relación?

Dejar ir y sanar implica la aceptación de ti mismo y tu pareja como individuos separados. Por lo general, las relaciones terminan porque las parejas tienen problemas individuales con la autoestima y la vergüenza, están mal emparejadas o tienen necesidades que no pueden comunicar o satisfacer.

La vergüenza a menudo hace que las personas se retraigan o alejen a la otra persona. Sanar el trauma y las pérdidas y construir la autoestima ayudan a las personas a avanzar en su vida y tomar más responsabilidad por sí mismas.

© Darlene Lancer 2013/2018