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Verificado por Psychology Today

Relaciones

6 Señales del esquema de privación emocional

¿Te malhumoras demasiado? Comprender qué lleva a esto podría ayudarte a lidiar con ello.

Los puntos clave

  • Con el esquema de privación emocional, tus cuidadores no escuchaban, validaban, espejeaban o respondían a tus necesidades.
  • Cuando somos adultos, nuestro cerebro podría reaccionar a las reglas de vida que ya no aplican.
  • El elemento clave para superarlo es conectarte con tu pasado y desarrollar empatía por el niño que fuiste y lo que necesitabas.
Fuente: Photo by Polina Zimmerman: Pexels
¡El mal humor puede ser un problema!
Fuente: Photo by Polina Zimmerman: Pexels

Hay 18 esquemas esbozados originalmente por el terapeuta de esquemas Jeffrey Young. Basado en mi propia experiencia clínica y estilo, estoy presentando mi propia visión de estos conceptos, además de las definiciones originales de Young. Los llamo el "ADN" de tu personalidad.

¿Alguna vez has sentido que las personas que amas suelen descuidar tus necesidades emocionales? Y entonces tienes ganas de enfurruñarte y te dices a ti mismo: "¿de qué sirve decir algo? No lo entenderá de todos modos". Ahora imagina que esta experiencia te surge mucho en las relaciones y parece constante a lo largo de tu vida. Podrías tener lo que se conoce como un esquema de privación emocional.

Este esquema dice que hay algo en las relaciones que repetidamente te provoca esta reacción, incluso cuando no estás siendo descuidado.

Los esquemas surgen de la experiencia de la infancia y son la forma en que nuestro cerebro intenta comprender cuáles son las "reglas" de las relaciones para que podamos anticiparnos y reaccionar según sea necesario. El problema es que estas reglas se basan en lo que sucede dentro de nuestra familia, con todas sus cualidades únicas. Y a menudo las reglas no se aplican fuera de la familia. Entonces, cuando nos convertimos en adultos, nuestro cerebro sigue reaccionando a las reglas de la vida que en realidad ya no se aplican.

La privación emocional tiende a surgir de un escenario en el que los cuidadores no estaban a la altura de escuchar, validar, reflejar y responder a tus necesidades. Pero sabías que tenías necesidades, y te quedaste enojado por eso.

El esquema de privación emocional tiene a tu cerebro diciendo: "¡Tienes necesidades reales y legítimas, y estás siendo ignorado! ¡Esto apesta! ¡Deberías estar enfadada! Pero, oye, has llegado tan lejos en la vida, y sigue sucediendo, así que es mejor que estés resentida y no digas nada".

Ahora imagina que tu cerebro te dice este tipo de cosas incluso cuando has crecido y ahora puedes estar cerca de personas que son más generosas emocionalmente que tu familia. Este esquema puede hacer que te cierres y te sientas desconectado, como si los demás fueran fríos, o que trates a los demás con frialdad en reacción.

¿Cuáles son las señales del Esquema de Privación Emocional?

  • Asumir negligencia donde no la hay
  • Enfurruñarse mucho
  • Sentirse solo e incomprendido
  • Estar frecuentemente resentido y enojado
  • Comportarse a menudo de manera pasivo-agresiva
  • Ser frío con los demás cuando intentan acercarse, como si "les estuvieras dando su propia medicina"

Si sientes que este podrías ser tú, ¿qué puedes hacer para hacer frente a este esquema y seguir adelante?

Cómo lidiar con el Esquema de Privación Emocional

  • Comprende tu pasado. Piensa en el contexto de tu familia cuando estabas creciendo. ¿Cuál era el tono emocional de la casa? ¿Cómo fue que te pudiste haber sentido emocionalmente descuidado con el tiempo? ¿Qué estaba pasando? No se trata de atacar a los miembros de la familia, sino de comprender lo que estaba sucediendo y por qué reaccionaste de la manera en que lo hiciste.
  • Infórmate sobre tus necesidades emocionales. Piensa en lo que necesitabas de niño. Simplemente dedica un tiempo a empatizar con tu yo infantil. Tal vez necesitabas un padre que se sentara contigo después de la escuela y realmente quisiera saber cómo te estaba yendo. O tal vez la negligencia fue sustancial, y podrías haber requerido a un adulto de fuera de la familia para ofrecerte apoyo.
  • Considera si te interpones en tu propio camino ahora. Está atento a los momentos en que reaccionas de forma exagerada ante los demás, no eres razonable con respecto a tus expectativas emocionales y eres demasiado crítico. Dale una oportunidad a la gente.
  • Habla. Piensa en formas de expresar tus necesidades que no sean enojadas ni resentidas. Está bien decirle a la gente lo que necesitas sin causar problemas.
  • Considera si te relacionas con personas que no te entienden. A veces, las personas con privación emocional se sienten atraídas por una pareja fría porque se siente familiar. Toma eso en consideración. Puede ser un desafío para tu pareja ser más cálido. Comunícate sobre eso.
  • Consulta a un terapeuta para obtener ayuda adicional. Este es un esquema difícil y puede estar profundamente arraigado. Un psicoterapeuta capacitado puede ayudarte a identificar los puntos ciegos que surgen a medida que trabajas para salir de esto. Encuentra un terapeuta en el directorio de Psychology Today.

El elemento clave para superar este patrón es hacer esa conexión con tu pasado y desarrollar una empatía real por el niño que fuiste y lo que necesitabas. Ahora necesitarás esa misma comprensión y empatía por ti mismo. Considera cómo defenderte a ti mismo y a tus necesidades emocionales de manera no conflictiva. ¡Te lo mereces!

A version of this article originally appeared in English.

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Acerca de
Richard Brouillette

Richard Brouillette, Trabajador Social Clínico con Licencia, es un terapeuta de esquemas que trabaja en línea con emprendedores, creativos y profesionales.

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