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Verificado por Psychology Today

Liderazgo

¿Por qué nos sentimos atraídos a líderes fuertes?

Un profesor deconstruye nuestra atracción por los tiranos.

Los puntos clave

  • Un tirano puede hacer un mejor trabajo manteniendo la seguridad de su grupo.
  • Para algunos, seguir a un líder tiránico es una elección sincera y sensata.
  • Las figuras duras y masculinas están dispuestas a hacer el trabajo sucio necesario.
Rob Walsh / Unsplash
Rob Walsh / Unsplash

Un nuevo estudio publicado en el Journal of Business Ethics explica por qué nos gusta que nuestros líderes sean rudos y despiadados. Este instinto, según la autora principal Agata Mirowska, está informado por factores culturales, religiosos, sociales y familiares.

"Los líderes que tienen rasgos antisociales negativos todavía parecen ser atractivos para sus seguidores", explica Mirowska. "Sabiendo que el autoritarismo ha sido un problema desde los albores de la historia, nuestra pregunta principal era por qué, a pesar de todos los elogios que damos a los buenos líderes, ¿la gente todavía está dispuesta a seguir a los tiranos?”

El estudio, realizado por Mirowska con Raymond Chiu y Rick Hackett, identificó siete adjetivos que describen a los líderes tiránicos. Ellos son:

  1. Prepotentes
  2. Insistentes
  3. Dominantes
  4. Manipuladores
  5. Vanidosos
  6. Egoístas
  7. Ruidosos

"Estos rasgos pueden parecer un anatema para los rasgos de los buenos supervisores y ejecutivos cotidianos, pero si nos tomamos un momento para considerar las figuras globales que capturan la imaginación de millones en industrias disruptivas, entretenimiento, deportes y política ultraconservadora, estos rasgos son bastante proféticos", destaca Mirowska.

El estudio se centró en tres posibles explicaciones para el misterioso encanto de los líderes tiránicos:

  1. Prototipos de 'líder ideal'. Mirowska explica que nuestro prototipo de cómo debería ser un líder se basa en gran medida en nuestras experiencias pasadas, educación cultural y exposición general a la vida. Si estamos buscando un líder, tendemos a elegir al candidato que se ajuste más a este prototipo. A menudo, este prototipo obedece a la personalidad de "hombre fuerte".
  2. Fundamentos morales. La Teoría de los Fundamentos Morales, propuesta por el psicólogo social Jonathan Haidt y sus colegas, sostiene que todos los seres humanos juzgan la calidad de cualquier cosa (incluido el liderazgo) a través de la lente de dos categorías básicas: Fundamentos individuales (poner las necesidades individuales en el foco principal) y fundamentos vinculantes (poner las necesidades de la comunidad en el foco principal). El estudio de Mirowska planteó la hipótesis de que un mayor respaldo a los fundamentos vinculantes haría que los líderes tiránicos fueran más atractivos debido a sus tendencias defensivas hacia los intereses del grupo.
  3. Visiones del mundo. Si las personas, en gran medida, ven el mundo que las rodea como peligroso, impredecible y amenazador, podría predisponerlas a elegir un líder tiránico que, aunque rudo y problemático, puede ser percibido como capaz de hacer un mejor trabajo manteniendo la seguridad del grupo.

Al encuestar a más de 1,100 adultos norteamericanos, el estudio de Mirowska llegó a dos hallazgos clave:

  1. La voluntad de respaldar a un líder tiránico no es una elección tonta o malvada. Para algunas personas, debido a su educación, experiencias de vida y creencias, seguir a un líder tiránico es una elección sincera y sensata para ellos y el grupo al que pertenecen, especialmente si ven el mundo como un lugar peligroso.
  2. Es más probable que esta tendencia esté presente en los hombres. Lo más probable es que esto se deba a la descripción que la sociedad hace de los líderes fuertes como figuras duras, a menudo masculinas, dispuestas a hacer el trabajo sucio de proteger al grupo.

¿Cómo dejamos atrás nuestra atracción por los tiranos para hacer espacio para formas de liderazgo más saludables y colaborativas que sean tan efectivas, si no más? Para abordar esta pregunta, Mirowska da el siguiente consejo a cualquiera que se encuentre respaldando a líderes tiránicos:

  1. Reflexiona sobre tu atracción. A menudo, nuestra atracción por un líder tiene sus raíces en una figura de nuestro pasado, un padre, un empresario, un entrenador o simplemente alguien a quien otros admiraban, que exhibía esta marca de liderazgo.
  2. Enfócate en los resultados, no en la personalidad. En lugar de la personalidad, es útil centrarse en lo que un líder puede hacer, dado su conjunto específico de cualidades. Trata de explorar si el líder está logrando el objetivo que prometió lograr. Si es así, trata de averiguar si hubo más consecuencias negativas que positivas de las decisiones que tomó.
  3. Evalúa si tu respaldo se basa en información limitada. Haz un balance de toda la información que tienes sobre el líder y si te dice lo suficiente sobre él y su potencial de liderazgo. Ayudará a descartar la posibilidad de que respaldes al líder simplemente porque coincides con el prototipo de un "líder ideal" en tu mente.
  4. Considera formas socialmente constructivas de lograr los mismos objetivos. Encontrar modelos a seguir que logren las mismas cosas que los líderes tiránicos, pero que también posean rasgos de personalidad más constructivos, puede hacer mucho bien. No solo estarás en buenas manos, sino que también te ayudará a cambiar tu visión del mundo en una dirección positiva.

"Creemos que la clave es la autoconciencia y la reflexión. Esto ayudará a las personas a reformular conscientemente sus prototipos de líderes subconscientes", concluye Mirowska.

A version of this article originally appeared in English.

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Acerca de
Mark Travers Ph.D.

El Dr. Mark Travers, es un psicólogo estadounidense con títulos de la Universidad de Cornell y la Universidad de Colorado Boulder.

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