5 Secretos para encontrar una gran pareja

Mi amiga Katia conoció a su futuro esposo, Tomás, durante la semana de orientación en la universidad. Eran la pareja que todos envidiaban. Pasaban todo el tiempo juntos y parecía que nunca discutían. Tenían la misma carrera y compartían muchas de sus aficiones. Les gustaban las familias y amigos del otro. Así que no fue una gran sorpresa cuando Katia y Tomás se casaron poco después de la graduación. Tienen dos niños dulces, un niño y una niña. Katia se queda en casa cuidando de los niños y Tomás tiene un trabajo bien remunerado como arquitecto en una empresa local.

Y el año pasado... se divorciaron.

La historia de Katia y Tomás no es única. Casi cada segundo matrimonio en los Estados Unidos se divorcia en algún momento.

Y, sin embargo, si Katia y Tomás hubieran estado buscando una pareja a través de una compañía de emparejamiento, habrían sido una pareja perfecta el uno para el otro. Pero algo no salió bien.

¿Qué es lo que Katia y Tomás, y tantos otros, están perdiendo? ¿Por qué nuestras "parejas perfectas" a menudo resultan ser menos que perfectas o francamente decepcionantes?

La base inconsciente de tus relaciones

En nuestra investigación, hemos encontrado que hay mucho más en la verdadera compatibilidad que variables como la edad, la religión, la cultura, los pasatiempos, las actitudes y las creencias. Parte del problema es que hay mucho que no sabemos sobre nosotros mismos, y no conocernos a veces se interpone en el camino de las relaciones exitosas.

Todo el mundo tiene un conjunto de historias de amor, es decir, un conjunto de ideas, creencias y preconcepciones sobre cómo debe ser una relación, cómo comportarse en una relación y cómo debe ser la pareja ideal. Pero no somos conscientes de nuestras historias de amor.

Así que si quieres encontrar a alguien que sea una buena pareja para ti, aquí hay cinco claves que debes tener en cuenta:

1. Tus historias de amor influyen en todos los aspectos de tu relación.

Tienes historias de amor en tu mente que determinan en qué parejas potenciales estás interesado y que dan forma a tus expectativas de cómo debe ser una relación, cómo debes comportarte en una relación, cómo debes interpretar las acciones de tu pareja, cómo debes interactuar con tu pareja, etc.

Tus historias de amor representan la esencia de tu vida: las relaciones de familiares, vecinos y amigos que has observado desde que eras un niño, tus propias experiencias con otras personas, las historias que has leído en libros y visto en películas.

No hay una realidad objetiva; más bien, son tus historias las que le dan significado a tu relación.

2. Las relaciones felices involucran historias de amor coincidentes.

Obviamente, no eres el único con historias de amor; todos los demás también las tienen. Pero hay historias que tienden a funcionar mejor y otras que no se adaptan bien. Además, algunas historias funcionan mejor juntas que otras. Por ejemplo, si tienes una historia de fantasía y estás buscando una relación súper romántica con tu princesa personal, pero tu pareja no está tan interesada en el romance, sino en crear una relación que funcione sin problemas como un negocio, asegurándose de que estás ganando buen dinero y has explicado claramente los deberes que deben cumplirse de manera responsable, es probable que ambos terminen decepcionados.

Tú y tu pareja no necesitan tener la misma historia, pero para una relación feliz a largo plazo, necesitarán historias que sean compatibles entre sí.

3. Entiende lo que realmente quieres de tu relación.

Las historias de amor que han dado lugar a lo que llamamos los "componentes centrales del amor". Dependiendo de tu historia de amor, es posible que tengas una necesidad diferente de:

• Intimidad (es decir, qué tan cerca, unido y conectado te sientes)
• Pasión (es decir, cuánta atracción emocional y física, así como romance, tienes en tu relación), y
• Compromiso en tu relación

El problema es que a menudo no somos conscientes de lo que realmente queremos y de dónde se queda corta nuestra relación. Profundizar y averiguar lo que quieres de tu relación en términos de intimidad, pasión y compromiso. ¿Tu pareja quiere lo mismo que tú? Si no, tratas de cerrar esas brechas para que tu relación funcione y satisfaga tus propias necesidades, así como las necesidades de tu pareja.

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4. Los sentimientos de tu pareja por ti importan menos de lo que crees.

En nuestros estudios, hemos descubierto que las personas a menudo no tienen la menor idea de cómo se siente su pareja con ellos, ¡y las personas que participaron en nuestros estudios tenían relaciones estables!

El punto es que nunca podemos saber realmente lo que otra persona piensa o siente.

Lo que importa para nuestra felicidad es cómo queremos que nuestra pareja se sienta por nosotros, y si creemos que realmente se siente de esa manera. Por ejemplo, tu pareja puede sentir que está muy comprometida con tu relación. Si no sientes que está comprometida y, en consecuencia, te sientes ansioso o celoso la mayor parte del tiempo, el compromiso objetivo de tu pareja realmente no importa mucho para tu felicidad.

Piensa si tienes suficiente (o demasiada) intimidad, pasión y compromiso en una relación, y si hay una brecha, ¡actúa!

5. Tu relación debe coincidir con tus necesidades (y las de tu pareja), no con las expectativas de quienes te rodean.

Tus historias de amor determinan el tipo de relación y pareja que estás buscando y cómo esperas que sea tu relación. Serás más feliz cuando tú y tu pareja tengan historias de amor compatibles y satisfagan las necesidades del otro. Las expectativas de quienes te rodean—padres, familiares y amigos—, así como las de la sociedad, importan mucho menos.

Tienes que darte cuenta de que no hay una historia de amor correcta o incorrecta, y está bien que busques tu felicidad sin importar lo que piensen los demás de tu concepción de una relación amorosa.

La clave de tu felicidad es encontrar a alguien cuya historia de amor sea compatible con la tuya.