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"Conocerse a uno mismo es el origen de la sabiduría." Esta famosa cita frecuentemente se le atribuye a Sócrates. Pero, ¿qué podemos hacer exactamente para "conocernos a nosotros mismos?"
En este artículo revelaremos seis elementos de autoconocimiento que ayudarán a comprender nuestra propia identidad. Al vivir nuestro día a día, podemos buscar pistas para encontrar estos bloques de construcción del ser.
Pero primero, ¿por qué es importante conocerse a uno mismo?
Los beneficios del autoconocimiento
Tal vez es obvio, pero estas son unas cuantas razones, resumidas, de por qué querríamos conocer nuestra propia naturaleza:
- Felicidad. Seremos más felices cuando expresemos quiénes somos realmente. Expresar nuestros deseos hará más probable que obtengamos lo que queremos.
- Menos conflicto interno. Cuando nuestras acciones externas estén de acuerdo con nuestros valores y sentimientos internos, experimentaremos menos conflicto interno.
- Mejor toma de decisiones. Al conocernos a nosotros mismos, somos capaces de tomar mejores decisiones en todos los aspectos, desde pequeñas elecciones como que suéter comprar hasta las más grandes decisiones como con qué pareja pasaremos el resto de nuestras vidas. Tendremos lineamientos que podremos aplicar para resolver los diversos problemas de la vida.
- Autocontrol. Cuando nos conocemos a nosotros mismos, entendemos que nos motiva a resistir malos hábitos y desarrollar los buenos. Tendremos la perspicacia de saber cuáles valores y metas activan nuestra fuerza de voluntad.
- Resistencia a la presión social. Cuando estamos bien cimentados en nuestros valores y preferencias, es menos probable que digamos que "sí" cuando queremos decir que "no".
- Tolerancia y comprensión para otros. Una consciencia de nuestras propias debilidades y batallas internas nos puede ayudar a empatizar con los demás.
- Vitalidad y placer. Ser quienes realmente somos nos ayuda a sentirnos más vivos y hace que nuestra experiencia de vida se vuelva más rica, grande y emocionante.
Ahora que estamos convencidos que vale la pena tener autoconocimiento (¡no es que haga falta convencernos!), podemos avanzar a esos signos vitales de autoconocimiento.
Los bloques de construcción del ser.
Los seis bloques esenciales de construcción del ser son Valores, Intereses, Temperamento, Temporalidad, Misión de vida y metas, y Fortalezas/Habilidades.
V = Valores
“Valores"— tales como "ayudar a los demás", "ser creativo", "salud", "seguridad financiera" y demás -- son guías para tomar decisiones y motivadores para llegar a metas. Varias investigaciones han demostrado que con solo pensar o escribir nuestros valores, se vuelve más probable que tomemos acciones saludables. La motivación proporcionada por valores dignos también puede mantenernos andando cuando estamos cansados, como se ha demostrado en varios experimentos psicológicos. Si queremos automotivación ¡conozcamos nuestros valores! (Se puede consultar la investigación aquí)
Intereses
Los "intereses" incluyen nuestras pasiones, hobbies y cualquier cosa que llame nuestra atención por un periodo largo de tiempo. Para conocer nuestros intereses debemos hacernos estas preguntas: ¿A qué le presto atención? ¿Qué me da curiosidad? ¿Qué me preocupa? El estado mental enfocado de estar interesados en algo hace más pintorescas nuestras vidas y puede darnos pistas sobre nuestras pasiones más profundas.
Muchas personas han construido una carrera alrededor de un interés profundo acerca de algo. Por ejemplo, un amigo mío se rompió la pierna cuando tenía 11 años y terminó tan fascinado por la sala de emergencias que decidió convertirse en un médico de urgencias.
Temperamento
"Temperamento" describe nuestras preferencias innatas. ¿Restauramos nuestra energía estando solos (introvertidos) o de estar con otras personas (extrovertidos)? ¿Somos de los que planean o de los que van con la corriente? ¿Basamos nuestra toma de decisiones en sentimientos o pensamientos y hechos? ¿Preferimos detalles o ideas generales? Saber las respuestas a preguntas como estas sobre el temperamento nos puede ayudar a acercarnos a situaciones en las cuales podremos florecer y evitar situaciones que nos marchitarían.
En la década de los sesenta, se valoraba la espontaneidad por encima de la planeación. Yo intentaba dejarme ir con la corriente pero me parecía que estaba desperdiciando mucho tiempo haciendo eso. Ir en contra de un aspecto de mi propia personalidad se convirtió en una tarea apabullante que en realidad no valía la pena.
Temporalidad
La categoría de temporalidad se refiere al momento en el que nos gusta hacer las cosas; nuestros bioritmos. ¿Somos personas matutinas o nocturnas? ¿A qué hora del día tenemos más energía? Si programamos actividades para los momentos en los que nos sentimos mejor, estamos respetando nuestra biología innata. Al pensar en mi vida de manera retrospectiva, me he dado cuenta que desde que nací he sido una persona matutina. ¿Aquellas divertidas pijamadas con amigas? Me encantaba que me incluyeran pero no me gustaba estar despierta hasta tarde.
Una alegría de mi vida adulta ha sido encontrar una pareja con biortimos como los míos. Nos levantamos temprano y nos acostamos temprano; ambos nos ponemos irritables si no tenemos tres comidas al día. Odiamos el brunch. Aunque la idea de preferencias biorítmicas puede sonar trivial comparada con otras cualidades del ser como los "valores", nuestra vida diaria es mucho más agradable cuando estamos en sincronía con nuestra biología. En todos los aspectos, es más fácil disfrutar la vida cuando no desperdiciamos energía fingiendo ser alguien que no somos.
Misión de vida y metas significativas
"¿Cuáles han sido los eventos más significativos de sus vidas?" Esta era una pregunta que me gustaba hacer cuando los estudiantes del colegio comunitario en el que trabajaba iban a verme para que los aconsejara sobre sus carreras. Una mujer de alrededor de 40 años se puso muy emocional al intentar responder. "Recientemente", me dijo "me pareció sumamente significativo cuidar de mi padre anciano durante su decadencia hasta llegar a un hospicio. Pude estar con él, tomando su mano, cuando murió." Mientras hablábamos de las dificultades y recompensas de los últimos días de su padre, tuvo un momento de realización y se dio cuenta que quería ser una enfermera de hospicio. (Cumplió su meta y estuvo entre las mejores de su clase.)
Hacernos esa misma pregunta: "¿cuáles han sido los eventos más significativos de mi vida?" nos ayudará a descubrir pistas sobre nuestra identidad escondida, nuestra carrera y nuestra satisfacción en la vida.
Fortalezas
Las "fortalezas" pueden incluir no solamente habilidades, capacidades y talentos, sino también fortalezas de personalidad como la lealtad, respeto por otros, amor por aprender, inteligencia emocional, justicia y más. (Aquí hay una lista de fortalezas de personalidad). Conocer nuestras fortalezas es uno de los pilares de la autoconfianza; no ser capaces de reconocer nuestros propios superpoderes podría ponernos en el camino hacia una baja autoestima. Mejor, convirtámonos en personas que "toman lo bueno", aceptan cumplidos y están conscientes de las habilidades que podrían ser pistas para las fortalezas. Por ejemplo: Un conocido nos dice que ama el sonido tranquilizante de nuestra voz. ¿Qué podríamos hacer con ese conocimiento? Igualmente, conocer nuestras debilidades nos ayudará a ser honestos con nosotros mismos y los demás acerca de las cosas en las que no somos buenos. Podríamos decidir trabajar en eses debilidades o intentar hacerlas una parte más pequeña de nuestra vida personal o profesional.
Ser fiel a uno mismo
Incluso si conocemos estos signos vitales, es difícil mantenernos fieles a nosotros mismos porque estamos cambiando constantemente y porque los valores de la sociedad con frecuencia entran en conflicto con los propios. Me encanta esta cita de mi colega escritora sobre hábitos, Gretchen Rubin:
"Mi primer mandamiento es "Ser Gretchen" - y aún así es muy difícil conocerme a mí misma. Me distraigo tanto con la manera en la que me gustaría ser, o la manera en la que asumo que soy, que pierdo de vista lo que es verdad."
Para todos nosotros, ser nosotros mismos suena más fácil de lo que realmente es. Pero hay algunos indicadores. Cuando hacemos un descubrimiento sobre algunos de estos signos vitales, nos sentimos emocionados. Actuar con autoconocmiento nos dará energía y nos ahorrará energía. Nos sentiremos más libres y fuertes porque ya no nos estamos adaptando a lo que "deberíamos" sentir, pensar o hacer. Por ejemplo, puedo recordar el alivio que sentí cuando me di cuenta que era introvertida. Qué reconfortante fue darme el regalo de tiempo a solas sin preguntarme si era un fenómeno de la naturaleza.
SIguientes pasos
Esta semana prestemos atención a estos seis pilares y preguntémonos qué aprendimos.
© Meg Selig, 2016. Todos los derechos reservados.
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A version of this article originally appeared in English.
