Estás sobrepensando tu salud mental

En estos días, hay tanta información sobre la salud mental que puede ser abrumador pensar en la cantidad de trabajo que parece que se necesitará para funcionar normalmente, y desalentador incluso saber por dónde empezar. ¿Debo descargar una aplicación de atención plena o comprar un libro de autoayuda? Y si es así, ¿cuál? ¿Estoy luchando "lo suficiente" como para justificar ver a un terapeuta o preguntarle a mi médico sobre medicamentos?

Revisa tus medidores cuando estés agotado.

Fuente: Photo by Josh Duke on Unsplash

Por supuesto, cualquiera de estas opciones puede ser buena: tomar medidas, cualquier acción es probablemente mejor que no hacer nada si te sientes atrapado. Pero ninguno de estos lugares debería ser el punto de partida.

Imagina que tu automóvil deja de funcionar de repente. Pregúntale a tu mecánico cuál es el problema y ofrece tus hipótesis personales después de hacer una búsqueda rápida en Internet. Creo que mi batería podría estar muerta, o tal vez tengo un motor de arranque defectuoso. Podría ser un problema con mi motor, también... ¿Crees que debería comprarme un coche nuevo? A veces, resulta que te acabas de quedar sin gasolina y necesitas llenar el tanque.

Puede que no haya nada "malo" con tu automóvil, al igual que puede que no haya nada "malo" con tu cerebro. Podemos olvidar que nuestro cerebro necesita rellenarse o recargarse (si tienes un cerebro Tesla) al igual que cualquier otra cosa que usemos que requiera energía. Puede ser difícil reconocer cuándo nos estamos quedando sin combustible hasta que es demasiado tarde, e incluso los medidores en los que confiamos para decirnos cuánto nos queda en el tanque pueden ser inexactos. ¿Podemos aceptar nuestras necesidades naturales de repostar y las limitaciones naturales que nos impiden continuar sin pausa? Todos consumimos combustible a diferentes intensidades y volúmenes en función de nuestros diferentes niveles de actividad a lo largo de cada día. De acuerdo con nuestras propias marcas y modelos personales, algunos de nosotros podemos ir más tiempo que otros sin necesidad de recargar, pero todos eventualmente nos quedamos sin gasolina.

El acrónimo F-U-E-L(en inglés) puede ayudarnos a recordar verificar si se tienen en cuenta nuestras necesidades básicas antes de buscar soluciones más complicadas, quizás innecesarias.

F(riends) Amigos: Se ha demostrado que una mayor integración social durante la infancia y la adolescencia predice una presión arterial y un índice de masa corporal más bajos cuando se miden en la edad adulta casi 20 años después.La investigación ha encontrado que las amistades pueden reducir los síntomas depresivos, particularmente en adolescentes en riesgo.

Utilidades: ¿Sabías que se ha encontrado una correlación entre el aumento de la ingesta de agua y la disminución de los niveles de depresión?³ Las utilidades se refieren a aquellas cosas que nuestro hogar necesita para funcionar y que nuestro cuerpo también necesita: agua, energía, eliminación de basura. Pregúntate si estás bebiendo suficiente agua, obteniendo el tipo y la cantidad de energía adecuados a través de tu dieta y manteniendo tu cuerpo limpio y libre de los desechos acumulados de la vida diaria.

Ejercicio: Puede ser contradictorio, pero en realidad puede haber una correlación inversa entre el ejercicio y los bajos niveles de energía y la fatiga. Dicho en otras palabras, el ejercicio puede revitalizarnos incluso si pensamos que nos va a hacer sentir más cansados y agotados.

L(eisure) Relajación: Se ha encontrado que las personas que participan en actividades de ocio más agradables tienen niveles más altos de bienestar psicológico positivo, así como niveles más bajos de síntomas depresivos y afecto negativo. Los niveles más altos de participación en actividades de ocio también se correlacionaron con factores fisiológicos como la disminución del cortisol, la disminución de los niveles de presión arterial y la percepción de una mayor función física. El ocio nos permite experimentar un aumento de las emociones positivas al socializar en buena compañía o realizar actividades placenteras por sí mismas, al mismo tiempo que brinda a nuestras mentes y cuerpos la oportunidad de recuperar los recursos gastados durante un duro día de trabajo.

Trata de "RECARGARTE"esta semana antes de saltar a la conclusión de que algo está roto, y ver si hace una diferencia.