Cómo sobrevivir a las fiestas en duelo

La temporada navideña puede parecer un castigo cuando estás de duelo. La actitud festiva forzada parece haber sido creada sólo para apretar aún más los nudos en el estómago. Ver a otras personas organizando fiestas, decorando árboles y usando suéteres feos a propósito puede hacerte querer meterte debajo de tu cama... y quedarte allí hasta el 2 de enero.

Entonces, ¿cómo puedes reunir fuerzas para afrontar el ataque del buen humor y tal vez incluso encontrar una o dos sonrisas durante las fiestas?

1. Renuncia a la tradición

La ausencia de tu persona puede ser demasiado difícil de soportar. El asiento vacío en la mesa donde siempre se sentaba tu madre, tu débil intento de recrear la ensalada que tu hermana traía cada año, los equipos de fútbol desequilibrados en el partido de tu familia antes de las comidas, todo esto puede acentuar tu pérdida. En lugar de eso, cambia las cosas.

Pasa de una comida en el comedor a un buffet en el estudio. Invita a un nuevo elenco de personajes a unirse a tu celebración. Consigue comida china o pide pizza en lugar de comida más tradicional. De todos modos, es probable que tu celebración parezca irreconocible sin tu persona. Hazlo deliberadamente diferente.

2. Ten un plan de salida

Si vas a ir a la casa de otra persona, averigua con anticipación cómo podrías irte si las cosas se sienten demasiado difíciles. Si no es incómodo hacerlo, dile a tu anfitrión que este es un momento difícil para ti y que vas a ir viendo cómo te sientes. Apóyate en un amigo de confianza para que sea tu excusa si necesitas salir temprano. Y no te sientas culpable si no vas. Prioriza lo que necesitas este año, no lo que otros podrían esperar de ti.

3. Haz voluntariado

Ayudar a otra persona es una excelente manera de conectar con los demás y encontrar significado en un momento en el que probablemente sientas aislamiento. Comedores populares, colectas de juguetes, entrega de comidas: no faltan oportunidades. Incluso podrías pensar en hacer voluntariado como una forma de honrar a la persona que extrañas.

4. Habla con alguien

Reconoce que este año probablemente se sentirá diferente y confía en un amigo, un familiar, un terapeuta o alguien que conozca en línea en tu grupo de duelo. Hablar de tus sentimientos en lugar de tragártelos te ayuda a integrar tu nueva realidad y brinda a los demás una oportunidad para apoyarte.

5. Cuídate

Este es el año para ser egoísta. ¿Qué quieres o necesitas? Vete de vacaciones. Recibe un masaje. Pasa el día leyendo en la cama. Y cuando otras personas pregunten si hay algo que puedan hacer, diles “í”. Pídele a un amigo que haga tus compras por ti o lleve a tus hijos al cine para que puedas tener tiempo para ti.

6. Espera lo inesperado

Las fiestas provocan muchas emociones en las mejores circunstancias, lo que definitivamente no es así. Date gracia para sentir lo que sea que estés sintiendo. Trátate como lo harías con tu mejor amigo y deja de lado cualquier expectativa sobre lo que “deben” ser las fiestas.

7. No te sientas culpable si te lo pasas bien

Si descubres que las fiestas son justo lo que necesitabas para restablecer la rutina, conectarte con tus seres queridos o incluso simplemente para distraerte, no sientas culpa. Mereces toda la alegría, incluso cuando estás de luto.

Es posible que el dolor y la alegría se mezclen, pueden sentarse uno al lado del otro en la mesa navideña, riendo y llorando juntos.