7 Formas fáciles de ser más agradable

¿Qué determina si haces clic con un nuevo amigo o tienes química con una posible pareja romántica? Podrías pensar que estos procesos de interacción y atracción son misteriosos, o determinados por los atributos personales únicos de una persona, por ejemplo, el ingenio. Sin embargo, la investigación en psicología social sugiere que el gusto y el amor a menudo se desencadenan por factores simples y mundanos, como lo cerca que está tu apartamento de las escaleras por donde pasan.

Estos factores se pueden aprovechar para hacerte más agradable y, lo que es más importante, para ayudarte a satisfacer tu necesidad fundamental de una conexión social auténtica. Aquí hay 7 de ellos.

1. Que te vean.

Cuanto más estamos expuestos a algo, más tendemos a que nos guste. Este fenómeno, llamado el mero efecto de exposición, ayuda a explicar por qué tendemos a preferir la música familiar a las nuevas canciones, elegimos a los candidatos políticos con mayor exposición a los medios y nos enamoramos más de los conocidos cuanto más frecuentemente interactuamos con ellos.

Puedes aprovechar el mero efecto de exposición para aumentar tu simpatía y ayudarte a conectarte con los demás. Haz un esfuerzo para ser visto, repetidamente. Enciende la cámara durante las reuniones de zoom. Comenta las publicaciones de otras personas en las redes sociales. Ve al gimnasio a la misma hora todos los días para aumentar las probabilidades de toparte con las mismas personas. Si puedes elegir tu oficina o cubículo, elige uno que esté cerca de la sala de descanso donde más personas te verán.

En resumen, hazte visible. No exageres. Demasiada exposición puede ser contraproducente, lo que se evidencia por el hecho de que puedes cansarte de escuchar tu canción favorita cuando la pones demasiadas veces.

2. Recuerda los nombres.

Recordar el nombre de alguien es importante porque indica que es importante para ti. Por otro lado, no recordar el nombre de alguien, u otros detalles importantes, socava la cercanía de la relación.

Una de las claves para conectarse con los demás, entonces, es recordar los nombres. El problema es que recordar un nombre puede ser difícil. Una estrategia eficaz basada en la investigación para recordar nombres se conoce como práctica de recuperación, que consiste en sacar información de la cabeza repetidamente. Poco después de que te presenten a alguien, recupera su nombre de la memoria. Pregúntate a ti mismo: "¿cuál era su nombre?” O bien, usa su nombre durante la conversación. Cuanto más a menudo recuperes un nombre de la memoria, más probable es que lo recuerdes.

3. Haz preguntas.

Sé genuinamente curioso sobre otras personas y hazles preguntas. La investigación muestra que las personas que hacen más preguntas durante las conversaciones se perciben como más receptivas y son más apreciadas por los compañeros de conversación. Cuando haces preguntas, en particular preguntas de seguimiento ("¿cómo fue esa experiencia?"), demuestras que estás escuchando activamente e interesado en lo que la persona tiene que decir.

Para causar una buena impresión, muéstrate más interesado en otras personas que en causar una buena impresión.

4. Sonríe.

A pesar de la máxima de "nunca juzgar un libro por su portada", juzgamos rutinariamente a las personas en función de su apariencia. Tendemos a suponer que las personas atractivas son más competentes y socialmente calificadas que otras. También encontramos más agradables a las personas atractivas.

Hay buenas noticias para aquellos que piensan que esta ventaja de belleza es injusta: una sonrisa brillante puede hacer que alguien sea más atractivo de inmediato. En un estudio reciente, Jessika Golle y sus colegas pidieron a la gente que calificara el atractivo de las caras generadas por computadora. Los rostros variaban en atractivo, y si sonreían o mostraban una expresión neutral. Los resultados mostraron que los rostros eran vistos como más atractivos cuando sonreían, lo cual es consistente con estudios anteriores sobre el tema. Lo que sorprendió a los investigadores fue que las caras menos atractivas pero sonrientes fueron calificadas como caras atractivas sin una sonrisa. Los investigadores concluyeron que "sonreír puede compensar la relativa falta de atractivo".

Si quieres ser percibido como más atractivo y más agradable solo muestra una sonrisa.

5. Descubre similitudes.

La investigación muestra que nos gustan las personas que comparten nuestros intereses, valores y rasgos de personalidad. Por lo tanto, el viejo dicho "pájaros del mismo plumaje vuelan juntos" es más preciso que la creencia popular de que "los opuestos se atraen".

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Cuando quieras hacer nuevos amigos, apila la baraja a tu favor conociendo a personas que compartan tus intereses. Luego, descubre otras cosas que tienen en común.

6. Haz sentir bien a otros.

De acuerdo con la teoría de la atracción de la recompensa, nos gustan las personas que nos recompensan, o a quienes asociamos con buenos sentimientos. Si quieres aumentar tu simpatía, haz que la gente se sienta bien en tu compañía. Sé amable y cálido. Ofrécele cumplidos genuinos. Si vas al cine para una primera cita, elige una película feliz en lugar de una triste.

Sé positivo en las redes sociales también. La investigación muestra que a las personas que tienden a hacer publicaciones más negativas en las redes sociales reciben menos likes que las que hacen publicaciones más positivas. Esto no significa que no puedas expresar tus sentimientos de manera auténtica cuando te sientes ansioso o deprimido, pero es posible que desees guardar las revelaciones negativas para conversaciones íntimas con amigos de confianza.

7. Expresa tu gusto por las otras personas.

El gusto es a menudo mutuo. De hecho, uno de los determinantes más poderosos de si nos gustará alguien es si le gustamos.

De una manera sutil, hazles saber a otras personas que te gustan. Puedes hacerlo con palabras ("me divertí mucho esta noche") o a través de un comportamiento no verbal, sonriendo cuando entran en la habitación.

Conclusión

Puedes aplicar la ciencia de la atracción para aumentar las probabilidades de que le gustes a alguien. Al hacerlo, no estás siendo manipulador. Solo estás facilitando la conexión con otros en nuestro mundo moderno, a menudo desconectado.

Imagen de LinkedIn: Rawpixel.com/Shutterstock