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Verificado por Psychology Today

Daniel S. Lobel Ph.D.
Daniel S. Lobel Ph.D.
Relaciones

Dos cosas esenciales para una relación estable y segura

Las herramientas indispensables para el matrimonio y otras relaciones íntimas.

Los puntos clave

  • El compromiso y el manejo de la ira son dos ingredientes esenciales en las relaciones íntimas estables y seguras.
  • El compromiso con la relación enfoca a los individuos en soluciones cooperativas en lugar de amenazar con el abandono.
  • Expresar el dolor que subyace a la ira, en lugar de la ira en sí, apoyará la relación en lugar de dañarla.

La mayoría de las personas buscan estabilidad y seguridad en sus relaciones, pero pocas lo logran. Las relaciones seguras generalmente se asocian con niveles más bajos de estrés, niveles más altos de comodidad y una mayor capacidad para negociar diferencias y problemas. El compromiso y las expresiones mínimas de enojo son dos características de las relaciones íntimas que respaldan la seguridad y la estabilidad.

Las relaciones inestables e inseguras, por el contrario, son transaccionales: se caracterizan por la última interacción. Cualquier frustración o insatisfacción se ve como el estado actual de la relación en su conjunto. La sensación constante de ser juzgado y la incapacidad de predecir el comportamiento futuro de otras personas importantes dan como resultado altos niveles de ansiedad e inseguridad.

Las relaciones estables y seguras están respaldadas por el compromiso, la lealtad, la previsibilidad y el perdón. Las personas con apego seguro tienen niveles más bajos de ansiedad y estrés asociados con la estabilidad de la relación, que se define por la historia y los patrones de comportamiento en lugar de eventos únicos.

Compromiso

La estabilidad en las relaciones se logra cuando ambas partes se comprometen a resolver conflictos y problemas con la actitud y la creencia de que se encontrarán soluciones que no amenacen ni dañen la relación. Las relaciones inseguras generalmente tienen amenazas directas e indirectas frecuentes para terminar la relación.

Helena y Ernesto tienen apego inseguro. En el siguiente diálogo, intentan negociar dónde ir de compras de alimentos:

Ernesto: Necesitamos comestibles. Vayamos a este supermercado cerca.

Helena: Odio ese lugar. Vamos al otro.

Ernerso: Es el doble de distancia.

Helena: Pero ahorraremos dinero.

Ernesto: Odio cuando discutes sobre tonterías.

Helena: ¡Odio cuando te pones controlador!

Ernesto: ¿Por qué no vas de compras sola?

Helena: ¿Por qué no vives solo?

Debido a la naturaleza insegura de su relación, incluso una simple conversación sobre dónde comprar alimentos termina en amenazas de abandono por parte de ambas personas.

Sergio y Sandra, por otro lado, tienen una relación segura y comprometida. Cuando tienen la misma conversación, obtienen un resultado diferente:

Sergio: Necesitamos comestibles. Vayamos a este supermercado cerca.

Sandra: Odio ese lugar. Vamos al otro.

Sergio: Es el doble de distancia.

Sandra: Pero ahorraremos dinero.

Sergio: Hoy tengo poco tiempo, así que solo me siento cómodo yendo al que está cerca. Si estás disponible mañana, estaré encantado de ir contigo al otro.

Sandra: Eso funciona para mí. ¿Tienes tiempo para dar un paseo ahora mismo?

Sergio: Me encantaría.

El compromiso que Sergio y Sandra tienen con su relación los mantiene enfocados en soluciones cooperativas cuando surgen conflictos. Ernesto y Helena responden al conflicto siendo críticos el uno del otro, lo que no es cooperativo y termina siendo divisivo.

Expresar enojo en las relaciones íntimas

La expresión de enojo, que generalmente toma la forma de un comportamiento amenazante o arremetido, casi siempre aleja al objetivo de la expresión. Las personas instintivamente retroceden o atacan cuando se enfrentan a la ira, lo que es divisivo y destructivo para la relación. La ira es una de las únicas emociones que repelen a los demás cuando se expresan. Tristeza, vergüenza, culpa, miedo, etc., todos tienden a acercar a los demás y deben expresarse cuando sea apropiado en relaciones íntimas.

La ira generalmente es causada por la misma cosa subyacente: el dolor. Nos enojamos cuando alguien nos ha lastimado, nos está lastimando o esperamos que nos lastime.

En las relaciones íntimas, el dolor subyacente debe expresarse en lugar de la ira resultante. Presumiblemente, en las relaciones íntimas, la otra persona se preocupa por tu dolor y hará esfuerzos para dejar de lastimarte. Una vez que se aborda el dolor, la ira generalmente se disipará. (Como esta técnica depende de que otros se preocupen por tus sentimientos, solo se puede usar de manera confiable en relaciones íntimas, incluso con amantes, familiares y amigos.)

La herramienta "ay"

La expresión más simple de dolor es decir "ay". Esto generalmente llama la atención de tu ser querido, y luego una conversación puede aclarar qué te está lastimando y cómo tu ser querido puede ayudar a aliviar tu dolor.

En el primer ejemplo, Ernesto expresa enojo hacia Helena cuando dice: "Odio cuando discutes sobre tonterías". Él usa el término "odio", que denota un alto nivel de ira, y la invalida al usar la palabra "tonterías" para describir sus preocupaciones. No es sorprendente que ella responda arremetiendo. Ella responde: "Odio cuando te pones controlador", reiterando la emoción de odio y acusándolo de ser controlador. Entonces llegan las amenazas de abandono y la relación se ve comprometida, si no destruida.

Si Sergio hubiera decidido expresar sus sentimientos a Sandra, podría haber elegido expresar su dolor y la respuesta que podría haber obtenido. Podría haber sonado así:

Sergio: Estoy frustrado por mi deseo de ir de compras contigo en conflicto con mi limitación de tiempo. Ojalá tuviera más tiempo hoy.

Sandra: Lo entiendo. Podemos ir mañana y tomarnos nuestro tiempo.

Dos características esenciales de las relaciones íntimas: el compromiso y minimizar la expresión de enojo, aumentarán la estabilidad y seguridad de sus relaciones íntimas si se practican de manera constante. Para que esto sea efectivo, ambos individuos en la relación deben ejercer estas características. La recompensa puede cambiar la vida.

A version of this article originally appeared in English.

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