Cómo lidian las personas mentalmente fuertes con las groserías y el sarcasmo

Un comentario ingenioso y oportuno entre amigos es señal de buen humor. Pero los comentarios pasivo-agresivos que enmascaran la ira que acecha justo debajo de la superficie constituyen sarcasmo.

A veces, los comentarios sarcásticos implican cumplidos ambiguos como "te ves bien para alguien de tu edad". El sarcasmo también incluye comentarios cínicos como, “habrías hecho más ventas si hubiera sonado más como si supieras de lo que estabas hablando. Solo digo".

Y parece que el mundo se está volviendo un poco más sarcástico todo el tiempo. Pero eso no significa que tengas que dejar que esos golpes te depriman o te estresen.

Por qué es importante permanecer fuerte

Un estudio de 2016 de la Universidad Estatal de Michigan encontró que la descortesía se propaga. Los investigadores descubrieron que las personas que estaban sujetas a comportamientos sarcásticos y a humillaciones desperdiciaban su energía mental tratando de interpretar las intenciones del individuo.

Se fatigaban mentalmente y tenían mayor dificultad para controlar sus impulsos y regular sus emociones. En consecuencia, era más probable que atacaran, porque carecían de la energía para reprimir su impaciencia.

Desafortunadamente, un individuo sarcástico puede llevar a la descortesía masiva, si no se tiene cuidado. Pero la buena noticia es que es posible mantenerse mentalmente fuerte incluso cuando se trata de comentarios sarcásticos.

Así es como las personas mentalmente fuertes lidian con el sarcasmo:

1. No renuncian a su poder.

Permitir que los demás controlen la forma en que piensas, sientes o te comportas les da poder sobre ti. Y ciertamente no quieres permitir que los comentarios negativos y sarcásticos influyan en cómo te sientes contigo mismo o qué tipo de día vas a tener.

Si una persona tiene el hábito de soltar comentarios sarcásticos, decide que no vas a permitir que esa persona ocupe demasiado espacio en tu vida. Comprométete a que sea un buen día, incluso cuando un compañero de trabajo sea descortés. O decide que no permitirás que los comentarios sarcásticos de tu supervisor afecten tu autoestima.

Replantea tus pensamientos perturbadores, respira profundamente para mantener la calma y aléjate de la situación cuando sea necesario.

2. Se mantienen fieles a sus valores.

Las personas mentalmente fuertes conocen sus valores y tienen como prioridad vivir de acuerdo con ellos, incluso cuando se enfrentan a personas sarcásticas.

Ya sea que eso signifique repetidamente decirse a sí mismos: "es importante tratar a los demás con respeto" o excusarse de situaciones que no están en consonancia con sus creencias, las personas mentalmente fuertes saben que mantener su integridad es la clave para la paz interior.

No importa cuán tentado estés, no te rebajes al nivel de otras personas. En última instancia, querrás poder mantener la cabeza en alto y saber que pudiste ser mejor que ellos..

3. Saben cuándo hablar y cuándo callar.

Las personas mentalmente fuertes entienden cuándo ser asertivas y no tienen miedo de hablar. Pero también reconocen que a veces es mejor ignorar a alguien que usa comentarios sarcásticos solo para llamar la atención.

No sienten que tengan que decir la última palabra y no están interesados en discutir por el simple hecho de hacerlo. Pero no tienen miedo de señalar a alguien por su comportamiento. Comprométete a utilizar la comunicación directa. Cuando esté justificado, di algo como: "me di cuenta de que pusiste los ojos en blanco cuando me recordaste ese proyecto. ¿Estás molesto por algo?

O si estás en una reunión y alguien ofrece un comentario sarcástico sobre tu última idea, voltéate y habla con las personas que parezcan realmente interesadas. Luego, pondrás tu atención donde debería estar: con personas positivas.

Ejercita tus músculos mentales

Todos tienen la capacidad de desarrollar músculo mental para poder manejar circunstancias difíciles y personas sarcásticas de una manera saludable. Pero si te encuentras en un entorno tóxico, es posible que debas salirte del todo: un lugar de trabajo insalubre afectará tu bienestar, sin importar cuánta fuerza mental poseas.