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Verificado por Psychology Today

Relaciones

5 Cosas que puedes hacer cuando tu pareja te irrita

Cómo detener el círculo vicioso y restaurar la paz

MilanMarkovic78/Shutterstock

Fuente: MilanMarkovic78/Shutterstock

¿Por qué nuestra pareja es la persona que más nos vuelve locos? ¿Es esta irritación apasionada el lado contrario del amor apasionado?

Enamorarse casi siempre involucra un proceso de idealización, así que en un inicio nada de lo que tu pareja hace es molesto. Es fácil enfocarse en las fortalezas del otro, estás maravillado por su compatibilidad. Cada momento juntos es cautivante. Conocerse es emocionante. Durante el cortejo, también estamos dispuestos a suavizar las diferencias. La amabilidad, paciencia y el perdón llegan fácil.

Pero, eventualmente, la pasión se diluye. Al comprometernos a estar juntos por ahora o para siempre, las fantasías y despreocupación del cortejo quedan de lado. Nos acostumbramos el uno al otro y nos vemos envueltos en vivir nuestras vidas cotidianas. A largo plazo, este cambio de enfoque es benéfico porque nos libera para construir una asociación real. Moverse más allá de la etapa que nos deja sin aliento del cortejo nos permite atender nuestras responsabilidades y hacer cosas. También permite relajarnos y ser nosotros mismos, conocernos de una forma más profunda, y confiar en que podemos contar el uno con el otro en las buenas y en las malas.

Desafortunadamente, al establecer una vida juntos, quizá descubramos que el "yo" verdadero pueden ser irritante. Lo que solía ser excitante, encantador o intrigante ahora nos vuelve locos- hábitos torpes, perspectivas irracionales, estándares irracionales, la falta de comunicación, el mal estilo al vestirse. La amabilidad, paciencia y perdón que antes eran abundantes ahora son escasas. La exasperación parece estar a la vuelta de cada esquina, especialmente durante periodos de estrés. Y tristemente, una relación cooperativa puede volverse combativa.

Este camino, aunque común y normal, también es doloroso. Cuando no se analiza puede desarrollar un círculo vicioso en el que sentirse crónicamente exasperado y desilusionado nos hace más proclives a enfadarnos ante el siguiente evento o situación irritante.

Detener este círculo vicioso es un reto, pero podemos hacerlo. Aquí hay cinco enfoques que pueden ayudarnos a poner nuestra relación en un mejor camino, y restaurar su calidez y camaradería:

Deborah L. Davis

Fuente: Deborah L. Davis

1. Comprender de qué forma estar irritado hiere tu relación.

Cuando nos irritamos, aún si lo guardamos para nosotros mismos, estamos juzgando a la otra persona. Juzgar es un camino seductor porque te hace sentir justo y "mejor que" alguien más. Pero esto dura solo un momento, tras el cual lo más probable es que nos sintamos drenados, abatidos o distantes de nuestra pareja. Cuando el juicio se vuelve un hábito, lleva al desprecio, que puede destruir una relación. Para evitar esta trampa, cuando sientas que la exasperación comienza a subir, recuerda que la consecuencia a largo plazo de emitir juicios es que envenena tu relación al reducir la conexión con quien amas. En lugar de esto, prométete tomar una posición de no juzgar a tu pareja, por ejemplo: "Esa es la manera de ser de mi pareja y mi lugar no es cuestionarla". También puedes ver estos momentos como una forma de entender a tu pareja de forma más profunda y aceptar sus diferencias. Tales como, "El enfoque de mi pareja está en otras cosas aparte de la moda", o "las cosas que me molestan a mí, no le molestan a él o ella. ¡Fascinante!" También puedes practicar ecuanimidad como: "los dos estamos haciendo lo mejor que podemos en este momento" o "vive y deja vivir".

2. Responsabilizarte por la parte que te corresponde en la dinámica.

Tus sentimientos de irritación no son culpa de la otra persona. Tu análisis de qué tan irritante es la otra persona es meramente tu juicio personal y tu perspectiva subjetiva, pero no necesariamente una realidad absoluta. Lo que juzgas como irritante quizá sea encantador o intrascendente en otras parejas -o culturas. Y lo que juzgas como irritante quizá para tus amigos pueda ser lindo o encantador. Reconoce tus sentimientos y velos como un reflejo de tu propia sensibilidad. No eres víctima de las peculiaridades de tu pareja; sino de las tuyas propias. Culpar a tu pareja por tu incomodidad o irritación es injusto y lleva a un sufrimiento innecesario para ambos.

3. En lugar de tratar mejorar a tu pareja, enfócate a mejorarte a tí.

Es tentador intentar moldear a tu pareja para que sea menos irritante. Quizá hasta puedas pensar, "¿no se beneficiaría de mis críticas y consejos?", "¿acaso no quiere comportarse (o verse, o sonar, o sentirse) mejor?" "¡Necesito que sea mejor!" Pero intenta verlo de esta forma: ¿cómo te sentirías si tu pareja pensara que tú debes ser mejor? ¿Cómo te sentirías si tu pareja creyera que te beneficias de sus críticas y consejos? ¿cómo responderías a su evaluación? La mayor parte de las personas se sentirían incómodas, enfurecidas, avergonzadas o apenadas. ¿Es este el paisaje emocional que estás cultivando? En lugar de esto, sé el cambio que quieres ver. Y apóyense mutuamente haciendo un trato como este: "Me enfocaré en mi mejora y crecimiento personal mientras tú te enfocas en el tuyo, y no nos haremos sugerencias a menos que lo pidamos".

4. Sé consciente que cuando muestras irritación, tú estás siendo irritante.

“¿Tienes que hablar tan fuerte en las fiestas?” “¿Por qué no puedes masticar con la boca cerrada?" "¿Te vas a poner eso?" "Eres malísimo manejando dinero". "¡Odio lo terca que eres!" "¿Tienes que estar en contra de todo lo que digo?" "¡Nunca me escuchas!" Cuando regañas es irritante. Esto solo abona los problemas reforzando el aspecto combativo de tu relación. Emitir un juicio o mostrar irritación es semejante a declarar la guerra.

5. Recuerda: Son aliados, no enemigos

Después de todo, ¿no es esta alianza el fundamento de su relación? Están del mismo lado, en el mismo equipo ¿no?Mantengan este objetivo a la vista siempre. Hagan un voto de renovarlo frecuentemente. Hagan del "somos aliados" un nuevo mantra.

Estos enfoques pueden ayudar a romper el círculo vicioso de irritación crónica y comenzar a reparar el daño ocasionado por las quejas crónicas. Si la relación también sufre de estrés adicional como una mala comunicación, alejamiento emocional, adicción, celos o coraje, quizá también requieran ayuda profesional. Pero lo que sea que esté ocasionando dolor y lo que sea que estén trabajando, si estas soluciones funcionan, les pueden ayudar significativamente a mejorar su propia sensación de bienestar en la relación.

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IMPORTANTE: Hay una gran diferencia entre sentirnos irritados por nuestra pareja y ser víctimas de abuso. Este artículo examina solo qué hacer cuando estamos irritados de manera crónica-- no cuando nos sentimos heridos de forma crónica, indefensos o bulleados. Para mayor guía y soporte adicional, recomiendo estos dos libros y sitios web de los siguientes autores.

"The Verbally Abusive Relationship" by Patricia Evans

"Too Good to Leave; Too Bad to Stay," by Mira Kirshenbaum

A version of this article originally appeared in English.

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Acerca de
Deborah L. Davis Ph.D.

La Dra. Deborah L. Davis, es psicóloga del desarrollo y autora de 6 libros, incluyendo uno sobre le hospitalización perinatal titulado A Gift of Time.

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