Se hablo tanto de salud mental como de salud conductual, pero a menudo no está claro si implican significados diferentes. Un breve resumen de dónde estamos con estos términos.
Los nuevos datos sugieren que los cerebros de los niños que recibieron azotes se parecen a los de aquellos con antecedentes de abuso. Desafortunadamente, las limitaciones del estudio pueden facilitar que algunos lo descarten.