No veas a los ojos largamente a tu pareja para conectar

En la búsqueda de una conexión e intimidad más profundas, las parejas a menudo recurren a consejeros de relaciones en busca de orientación. Si bien algunas sugerencias de expertos en relaciones ofrecen ayuda práctica, basada en investigaciones, muchas son caprichosas y poco prácticas.

Construir mapas de amor o un tablero de visión, tomar clases de baile juntos o compartir un baño, escribir una carta de amor cada semana o dejar lindas notas adhesivas el uno para el otro puede parecer un poco trillado y fuera de contacto con las realidades de la vida diaria.

Un consejo particularmente popular es pasar tiempo mirándose a los ojos el uno al otro. Incluso El New York Times lo promueve. Si quieres probarlo, coloca dos sillas, una frente a la otra, con las rodillas tocándose. Respiren lenta y profundamente. Continúen mirándose fijamente durante cinco minutos. Siéntete libre de parpadear.

Los defensores afirman que reduce las tensiones, profundiza su conexión emocional y mejora la intimidad. A primera vista, incluso parece que hay algo de ciencia detrás de esto.

Pero hubo pequeñas cantidades en el estudio original que iniciaron la locura, y muchos estudios desde entonces no han logrado replicar los hallazgos. Aunque existe cierta evidencia de la liberación de oxitocina (la "droga del amor") asociada con la mirada, muchos investigadores piensan que es la experiencia de sentirse conectado lo que causa cambios fisiológicos, en lugar del contacto visual en sí mismo. En otras palabras, el contacto visual te hace sentir conectado, pero puedes lograr la conexión de otras maneras.

Entonces, aunque mirarse a los ojos el uno al otro no hará ningún daño, hay muy poca evidencia de que haga una gran diferencia en la satisfacción a largo plazo de tu relación. Especialmente si odias ese tipo de cosas o si tu pareja se siente incómoda haciéndolo.

Si vas a hacer un tablero de visiualización, trata de divertirte un poco con él.

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Tampoco hagan un tablero de visualización

Tampoco hay evidencia del valor de hacer un tablero de visualización juntos.

El objetivo aquí es alinear sus metas y aspiraciones en forma visual. Al recopilar imágenes, citas e imágenes, y luego ensamblarlas en una pizarra, visualizan sus sueños colectivos y su futuro compartido. Sus defensores te dirán que te ayuda a conocer el mundo interior de tu pareja al comprender sus esperanzas y sueños.

Si lo tuyo son los proyectos artesanales elaborados, hazlo. Pero, para muchas parejas, especialmente aquellas con horarios ocupados y sin inclinaciones artísticas, este tipo de ejercicio puede parecer incómodo o ridículo. Podría decirse que sus objetivos se pueden lograr de manera más simple: Piensa en pequeños actos de conexión cotidianos y repetibles.

En lugar de tableros de visión, mirar a los ojos o un diario de relaciones compartidas, ¿qué tal con el objetivo de conectarse una vez a la semana para hablar sobre dónde se ven a sí mismos en el futuro y cómo pueden apoyarse mejor entre sí? Podrían hacer esto mientras hacen algo que ya hacen juntos: una caminata nocturna o un café el domingo por la mañana.

En lugar de noches elaboradas en restaurantes románticos, tal vez busquen una pizza casera y una película juntos en casa. Esto puede ser igual de vinculante sin el gasto.

En lugar de inscribirse en clases de baile, dedicarse a pasatiempos compartidos o reservar una segunda luna de miel, apunten a lo pequeño. Sigan los mejores consejos actuales sobre cambio de hábitos, productividad y rendimiento: Hagan lo que sea repetible y piensen en ganancias marginales, no en grandes ganancias.

Tal vez sea un croissant juntos en un café local antes del trabajo. O una taza de té juntos antes de acostarse, mientras conversan sobre su día. En lugar de cartas de amor, tal vez sea un mensaje de texto reflexivo antes de una gran reunión o presentación que tendrá tu pareja.

Los pequeños actos de amor tienen un gran impacto. En lugar de reservar un mini descanso europeo, expresa regularmente aprecio y respeto por tu pareja: Felicítala cuando se vea bien, logre algo en el trabajo o ayuden a un amigo. Expresa gratitud por las cosas que hace por ti y las tareas que hace en el hogar. Muestra afecto, incluso cuando estés cansado. Sé considerado/a. Limpia tu desorden. Sé alguien con quien es un placer vivir.

Sé realista

Tu relación probablemente sea muy importante para ti. Lo es para la mayoría de la gente. Pero no lo abarca todo. Los consejos de relaciones populares nos dicen que nuestra pareja lo es todo para nosotros. Las películas populares nos dicen que nuestra pareja nos completa. Las canciones populares celebran a las parejas que son perfectas. Nada de lo cual es cierto.

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Pasar tiempo separados, persiguiendo intereses y pasatiempos individuales, en realidad mantiene un sentido de curiosidad por tu pareja. Así que anímense uno al otro a perseguir intereses personales, amistades y metas.

Y respeten la necesidad de privacidad y tiempo a solas de los demás. Las parejas con niños pequeños saben que estar solos en el baño puede ser realmente un momento zen. Si les atrae bañarse juntos, abran el aceite de lavanda y enciendan las velas perfumadas. Pero si una ducha sola funciona mejor, háganlo. Las relaciones realistas que llegan lejos tienden a ser aquellas que mantienen un equilibrio entre cercanía e independencia.

Conclusión

Si bien las sugerencias bien intencionadas tienen como objetivo fomentar la intimidad y la conexión, muchas son poco prácticas y superficiales. La rutina diaria de la vida moderna deja poco espacio para rituales de relación elaborados, que pueden terminar pareciéndose más a otra tarea, a menudo decepcionante, que a un gesto romántico. Las relaciones prosperan con pequeños actos consistentes de amabilidad y comprensión, no con momentos transformadores en un baño de burbujas. Adapta los consejos sobre relaciones a tus circunstancias y personalidad. Sé flexible y encuentra lo que funcione mejor para ti y tu pareja. Y trata de hacer de la búsqueda de la cercanía una fuente de satisfacción y alegría, no de estrés.