6 señales de infidelidad emocional

Cuando piensas en una aventura, lo primero que te viene a la mente es la intimidad sexual con otra persona fuera del matrimonio. Eso, para muchos, es el epítome de la infidelidad. A menudo, estos encuentros sexuales están muy cargados emocionalmente. Pero a veces, son solo una serie de encuentros sexuales que a menudo no suman mucho. Sin embargo, uno solo de estos puede ser suficiente para poner fin a un matrimonio, aunque algunas personas tolerarán la infidelidad a lo largo de un matrimonio por muchas razones personales.

¿Qué sucede entonces, cuando no ha habido intimidad sexual, pero un cónyuge o pareja comprometida está emocionalmente apegado a alguien fuera de su matrimonio? Permítanme primero hacer la distinción entre una relación platónica (una que podrías tener con un amigo del sexo opuesto) y una infidelidad emocional. Inicialmente pueden parecer iguales, pero con el tiempo, hay realmente grandes diferencias entre estos dos tipos de relaciones.

Una relación platónica es realmente solo un amigo que te puede gustar o puedes incluso amar, que admiras y en quien confías, y que deseas mantener en tu vida. A menudo es alguien que conoces desde hace mucho tiempo, no es una relación sexualmente cargada, y es alguien que deseas compartir con tu cónyuge. Esta última parte es especialmente importante porque en una infidelidad emocional, la "otra persona" es alguien que no quieres compartir con tu cónyuge y probablemente ¡ni siquiera quieres que sepa!

Una infidelidad emocional describe una relación donde el nivel de intimidad emocional es excesivo y donde el nivel de emoción invertido en alguien fuera del matrimonio infringe la intimidad entre los cónyuges o parejas comprometidas. Este involucramiento emocional extramatrimonial reemplaza la intimidad de una pareja y, obviamente, puede abrir una brecha entre las parejas. Esto a su vez, puede crear distancia y un sentimiento de separación, alienación y soledad.

Hay muchas razones por las que suceden las infidelidades emocionales. Tal vez, tu trabajo te exige pasar mucho tiempo con un compañero de trabajo o colega. Entonces, lo que comienza como una necesidad, por ejemplo, trabajar en un proyecto que te mantiene en la oficina durante horas y días, se convierte en algo más. A veces, un cónyuge se queda solo mucho tiempo y conoce a alguien en un entorno social, en el gimnasio, o incluso al recoger a los niños en la escuela. Tal vez, tu matrimonio está en un bache y no sientes la inclinación de tratarlo con tu pareja por lo que un oído simpático, alguien que escucha y te presta atención es un alivio bienvenido. A veces, las personas simplemente no tienen las habilidades para arreglar lo que está mal o roto en su matrimonio. Pueden retirarse o cerrarse y no buscarán ayuda profesional, por lo que dejan que su cónyuge satisfaga sus necesidades emocionales en otro lugar.

Para muchas personas, entonces, una infidelidad emocional es tan grave como una infidelidad sexual. Hay infidelidad y, en última instancia, es una traición al compromiso y la confianza.

Por lo tanto, estas son algunas de las señales que podrían ayudarte a identificar una infidelidad emocional.

Algo se siente “fuera de lugar”. No es de extrañar que cuando está sucediendo una infidelidad emocional, una persona que ha compartido un cierto grado de conexión e intimidad con su cónyuge de repente se de cuenta de que algo simplemente ya no se siente bien. Literalmente, pueden sentir que su pareja se aleja de ellos, sienten la preocupación de una pareja con algo (o alguien) más, y pueden encontrar difícil o imposible conectarse íntimamente de la misma manera que antes lo hacían. No ignores tu instinto. No solo estás celoso, probablemente tengas razón.

Tu cónyuge está siendo reservado. Érase una vez, que tú y tu pareja compartían todo. Ahora puede hacer excusas para salir de la casa, lejos de ti por períodos de tiempo. Puede proteger su teléfono celular, manteniéndolo a la vista todo el tiempo para que no puedas ver con quién ha estado hablando o enviando mensajes de texto.

Del mismo modo, el tiempo dedicado a la computadora puede aumentar muchas veces. Durante un año de mi práctica, vi a dos personas que estaban teniendo relaciones íntimas a larga distancia en línea, mientras que tenían una relación real, y al cónyuge de alguien teniendo una aventura emocional. En esta última situación, el secreto salió por la ventana cuando el cónyuge se comunicaba abiertamente en línea con su "otro emocional" contra las protestas y la angustia de su cónyuge. La infidelidad emocional le costó a la pareja su matrimonio.

Hay una distancia creciente entre tú y tu cónyuge. La brecha de la intimidad se está ampliando emocional y físicamente. Tu cónyuge a menudo falla, ya sea que esté demasiado ocupado o demasiado cansado para hacer tiempo para ti. Puede parecer distraído, lejano, frío o desinteresado. Tener una relación emocional requiere mucho tiempo y energía, además del esfuerzo que se necesita para cubrir todas tus bases para que no te descubran. Y, de nuevo, es posible que no te necesiten porque sus necesidades están siendo satisfechas por otra persona.

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Tu cónyuge está pasando más tiempo en el trabajo o funciones relacionadas con el trabajo. Esto razonablemente parece una buena excusa para pasar menos tiempo contigo. Después de todo, a menudo es necesario estar en el trabajo más horas para un proyecto específico y/o durante un cierto período de tiempo. Cuando esto se combina con un cierto compañero de trabajo o colega que se menciona a menudo y que también está trabajando esas mismas horas, es razonable sentir algo de sospecha.

Tu cónyuge de repente cambia su apariencia. Perder peso, cambiar el cabello y el maquillaje, volverse más interesado en el guardarropa pueden ser señales de que un cónyuge puede estar tratando de complacer a otra persona. Mientras que tomarse el tiempo para mejorar la forma de verse y sentirse acerca de sí mismo es generalmente beneficioso, el cambio repentino o preocupación por la apariencia en conjunción con algunos de las otras señales pueden ser un delator. Del mismo modo, cuando un cónyuge de repente, de la nada, desarrolla un interés en algo nuevo que ninguno de los dos ha expresado interés antes (a menos que, por supuesto, así sea como siempre ha sido) .

Tu cónyuge se vuelve crítico contigo. El comportamiento de tu cónyuge hacia ti cambia. Puede estar irritado o molesto, enojado, culparte, ser crítico y hacer juicios de muchas de las cosas que haces. Es casi una postura defensiva: está haciendo algo por lo que puede sentirse terriblemente culpable mientras disfruta del pico emocional que está recibiendo de otro; así que de alguna manera tiene que echarte la culpa, el que lo provocó todo.

¿Qué puedes hacer cuando sospechas o tienes evidencia de una aventura emocional?

Intenta cortarla de raíz. Esto significa que debes comenzar a hablar con tu cónyuge sobre lo que crees que está sucediendo, lo que estás observando, tan pronto como sospeches algo. Sé muy específico acerca de los casos en los que las cosas han parecido "fuera de lugar" para ti. Descríbele a tu cónyuge lo que ha cambiado acerca de cómo se está comportando contigo y hacia la relación que tienen juntos. Debes estar preparado para la negación, la defensividad, la ira y la resistencia a cambiar la situación. Pero sé persistente, podría marcar la diferencia en si mantienes tu matrimonio / relación o no.

Haz reglas y establece límites. Incluso si tu cónyuge se niega a cambiar lo que está haciendo no significa que no debas tomar decisiones por ti mismo, para lo que es mejor para ti. No te quedes pasivamente jugando a la víctima. Decide cuáles son sus expectativas para tu matrimonio/ relación. Si tu cónyuge continúa con lo mismo, ¿qué harás, dejar el matrimonio, vivir dentro de la relación tal como está, o algo más? Solo tú puedes decidir por ti mismo. Toda relación pasa por cambios. Eso es de esperarse. Pero si tener un tercero en tu relación más íntima no es para ti, entonces necesitas decidir lo que es mejor para ti, para tu futuro.

A veces las infidelidades emocionales son "gritos de ayuda", un camino a través de un período difícil, y un medio para llamar la atención que puede faltar. Atravesar y superar una infidelidad emocional puede ayudarle a una pareja a acercarse una vez que las dinámicas problemáticas son expuestas y se trabaja en ellas.

Obtén ayuda profesional. Aparte de tener un amigo cercano o miembro de la familia en el que se puede confiar y que puede ayudarte a ordenar esta difícil experiencia, un terapeuta de parejas y la terapia individual puede dar ideas y estrategias esenciales para poner tu relación de nuevo en marcha. A veces, las parejas hablan entre sí y no pueden ir más allá de sus diferencias y aquí es donde la ayuda de un terapeuta puede ser de gran valor.

Puedes encontrar terapeutas especializados en parejas en el directorio de Psychology Today.

Sin embargo, a veces para cuando los cónyuges van a la terapia de pareja, ya es demasiado tarde. En el centro de su corazón, un cónyuge ha decidido que el matrimonio / relación ha terminado; que trabajar para mantenerla está fuera de discusión. A veces una infidelidad emocional no es la respuesta tampoco: el matrimonio puede terminar y tal vez la infidelidad emocional puede terminar también. A veces, las infidelidades emocionales son catalizadoras para el cambio.

La conclusión es estar atento a tu cónyuge, estar abierto a cambiar lo que no funciona en la relación, honrar tus sentimientos e intuición, así como la de la otra persona, y estar dispuesto a trabajar para salvar tu matrimonio si sientes que tu relación es lo más importante para ti.

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