¿Cómo puede un psicólogo ayudar con el dolor crónico?

Un psicólogo que trata a pacientes con dolor crónico a menudo trabajará en conjunto con sus médicos para asegurarse de que se aborden las necesidades médicas y emocionales de las personas. Una vez que un médico haya aprendido todo lo que pueda sobre el estado físico y emocional de un paciente, diseñará un plan de tratamiento para esa persona, que puede implicar enseñar técnicas de relajación, cambiar las creencias sobre el dolor y las alteraciones del estilo de vida que puede requerir, mejorar las habilidades de afrontamiento y abordar sentimientos de ansiedad o depresión.

¿Quién puede diagnosticar el dolor crónico?

El dolor crónico puede ser difícil de diagnosticar y la causa no siempre es necesariamente física. Un médico que se especialice en el manejo del dolor crónico podría dirigir una variedad de pruebas y exámenes para determinar la causa del dolor de alguien. Un neurólogo también puede hacer un diagnóstico. Sin embargo, es un proceso que puede llevar mucho tiempo, por lo que si alguien continúa experimentando dolor mientras espera un diagnóstico más claro, es posible que desee comenzar un tratamiento psicológico para ayudarlo a controlar los síntomas.

¿Cuál es el mejor tipo de terapia para el dolor crónico?

Los cambios en el estilo de vida son esenciales para controlar el dolor crónico, como no fumar, limitar el consumo de alcohol y mantener buenos hábitos de sueño, una dieta saludable y una rutina de ejercicios, y la terapia puede ayudar con todo esto. Dado que el estrés puede provocar o exacerbar el dolor, los psicólogos pueden ayudar a los pacientes a aprender técnicas de respiración y meditación para ayudarlos a controlar los episodios dolorosos, y estrategias de terapia cognitivo conductual para lidiar con el dolor y el estrés y desafiar los pensamientos inútiles o catastróficos.

¿Se puede superar el dolor crónico con terapia?

Es probable que diferentes personas que viven con dolor crónico tengan diferentes experiencias y respondan al tratamiento de manera diferente. Pero incluso si las causas físicas y los síntomas persisten, la psicoterapia puede ayudar a las personas a manejar mejor su condición, sentir una mayor sensación de control y mejorar su vida diaria. El dolor activa algunas de las mismas áreas del cerebro que manejan las emociones. El dolor crónico, al desencadenar emociones negativas, puede contribuir a problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad. La terapia puede ayudar a abordar estas preocupaciones.