Skip to main content

Verificado por Psychology Today

Agotamiento

Cómo saber si sufro desgaste

Running out of gas? Recognizing the signs of burnout before it's too late

El agotamiento es uno de los riesgos de la vida que debería preocupar a las personas exitosas, pero, tristemente, a menudo a causa de sus personalidades de "puedo hacerlo todo", rara vez lo ven venir. Debido a que las personas exitosas suelen ser muy apasionadas por lo que hacen, tienden a ignorar el hecho de que están trabajando largas jornadas, asumiendo cargas de trabajo extremadamente pesadas y presionándose demasiado por ser excelentes; una receta perfecta para el agotamiento.

¿Qué es el desgaste?

El desgaste es un estado de estrés crónico que lleva a:

  • cinismo y desconexión
  • sensación de ineficacia y falta de logros

Cuando estamos en las garras del desgaste total, ya no somos capaces de funcionar efectivamente a nivel personal o profesional. Sin embargo, el agotamiento no sucede repentinamente. No nos despertamos una mañana y de repente estamos desgastados. Su naturaleza es mucho más insidiosa, se arrastra sobre nosotros con el tiempo como una fuga lenta de agua, lo que lo hace más difícil de reconocer. Aún así, nuestras mentes y cuerpos nos dan advertencias y si sabemos qué buscar, podemos reconocerlo antes de que sea demasiado tarde.

¿Cuáles son las señales del agotamiento?

Cada una de las áreas descritas arriba se caracteriza por ciertas señales y síntomas (a pesar de que hay coincidencias en algunas áreas). Estas señales y síntomas existen sobre un continuo. En otras palabras, la diferencia entre el estrés y el desgaste radica en el grado, lo que significa que a más pronto reconozcamos las señales, más capaces seremos de evitar el desgaste (si es que hacemos algo para atender los síntomas al reconocerlos).

  • Señales de desgaste físico y emocional:
  1. Fatiga crónica. En las etapas tempranas, carecemos de energía y nos sentimos cansados casi todos los días. En etapas posteriores, nos sentimos física y emocionalmente agotados, drenados y exhaustos, y es posible que tengamos una sensación de terror por lo que vendrá día con día.
  2. Insomnio. En las etapas tempranas, tendemos a tener problemas para quedarnos o permanecer dormidos una o dos noches por semana. En las siguientes etapas, el insomnio podría transformarse en una odisea persistente por las noches, sin importar lo exhaustos que nos sintamos, no podemos dormir.
  3. Olvidar cosas/dificultades para concentrarse y prestar atención. Ligeras dificultades para concentrarnos y empezar a olvidar cosas son señales tempranas. Posteriormente, este tipo de problemas pueden llegar al punto en el que no es posible hacer el trabajo y las cosas empiezan a apilarse.
  4. Síntomas físicos. Los síntomas físicos suelen incluir dolores de pecho, palpitaciones del corazón, dificultad para respirar, dolor gastrointestinal, mareo, desmayos y/o dolores de cabeza (todos estos síntomas deberían ser evaluados por un médico).
  5. Aumento de enfermedades. Debido a que el cuerpo está agotado, nuestro sistema inmune se debilita, dejándonos más vulnerables a infecciones, resfriados, gripes y otros problemas médicos relacionados con el sistema inmunitario.
  6. Pérdida de apetito. En las etapas tempranas tendemos a perder el apetito y por lo tanto obviar algunas comidas. En etapas posteriores es posible dejar de sentir hambre por completo y empezar a perder cantidades considerables de peso.
  7. Ansiedad. Al principio, tendemos a experimentar síntomas leves de tensión, preocupación y nerviosismo. Conforme nos acercamos más al desgaste, la ansiedad puede volverse tan seria que interfiere con nuestra capacidad para trabajar con productividad y podría incluso causar problemas en nuestra vida personal.
  8. Depresión. En las etapas tempranas, probablemente nos sintamos ligeramente tristes y ocasionalmente desesperanzados, y tal vez experimentemos sensaciones de culpa e inutilidad como resultado. En el peor de los casos, llegamos a sentirnos atrapados y severamente deprimidos, creyendo que el mundo estaría mejor sin nosotros. (Si la depresión llega a este punto, es importante buscar ayuda profesional inmediata. En el directorio de Psychology Today hay un listado de terapeutas disponibles.
  9. Enojo. Al principio, esto podría presentarse como tensión interpersonal e irritabilidad. En etapas posteriores, esto podría convertirse en explosiones de ira y discusiones serias en casa y en el lugar de trabajo. (Si la ira llega al punto de convertirse en pensamientos o actos de violencia hacia la familia o colaboradores, también es importante buscar asistencia profesional inmediata.)
  • Señales de cinismo y desapego
  1. Pérdida de placer. Al principio, la pérdida de placer puede parecer muy leve, cosas como no querer ir a trabajar o estar ansiosos por salir. Sin intervención, la pérdida de placer puede extenderse a todas las áreas de nuestra vida, incluyendo el tiempo que pasamos con amigos y familiares. En el trabajo, es probable que intentemos evitar proyectos y busquemos maneras de escapar por completo.
  2. Pesimismo. Al principio esto suele presentarse como un monólogo interno negativo y/o como pasar de ver el vaso medio lleno a verlo medio vacío. En el peor de los casos, esto va más allá de cómo nos sentimos con respecto a nosotros mismos y se extiende hasta generar problemas de confianza con colaboradores y miembros de la familia y una sensación de que no se puede contar con nadie.
  3. Aislamiento. En las etapas tempranas, esto puede parecer solo una leve resistencia a socializar (por ejemplo, no querer ir a comer con alguien, cerrar la puerta ocasionalmente para que nadie entre). En las etapas posteriores, llegamos a enojarnos cuando alguien nos habla, o empezamos a llegar muy temprano o a salir muy tarde para evitar interacciones.
  4. Desapego. El desapego es una sensación general de estar desconectado de los demás o de nuestro ambiente. Toma la forma de los comportamientos descritos arriba y da como resultado el distanciamiento emocional y físico de nuestro trabajo y otras responsabilidades. Tal vez nos reportamos enfermos con mucha frecuencia, dejamos de responder llamadas y correos o llegamos tarde regularmente.
  • Señales de ineficacia y falta de logros
  1. Sentimientos de apatía y desesperanza. Esto es similar a lo que se describe en las secciones de pesimismo y depresión en este artículo. Aparece como una sensación generalizada de que nada está saliendo bien y nada importa. Conforme empeoran los síntomas, estos sentimientos suelen volverse paralizantes, lo que nos hace sentir como si nada tuviera sentido.
  2. Irritabilidad aumentada. La irritabilidad suele provenir de la sensación de ser ineficaces, irrelevantes, inútiles y de una sensación cada vez más grande de no ser capaces de hacer las cosas con tanta eficiencia o efectividad como lo hicimos alguna vez. En el peor de los casos puede terminar por destruir relaciones y carreras.
  3. Falta de productividad y mal desempeño. A pesar de invertir largas horas, el estrés crónico evita que seamos tan productivos como alguna vez fuimos, lo que suele resultar en proyectos incompletos y una lista cada vez más larga de cosas por hacer. En ocasiones se siente como sin importar cuánto trabajemos, no podemos escalar la montaña de cosas por hacer.

Si no hay señales de estos problemas ¡qué bien! Pero, siempre hay que tener estas señales de advertencia en mente, recordando que el desgaste es una criatura insidiosa que nos acecha mientras seguimos con nuestras vidas ocupadas.

Experimentar estos síntomas debe ser una llamada de atención para darnos cuenta de que estamos en un camino peligroso. Es importante darnos un momento para evaluar honestamente el nivel de estrés en nuestras vidas y encontrar maneras de reducirlo antes de que sea demasiado tarde. El desgaste no es como un catarro, no se va después de unas semanas a menos de que hagamos cambios en nuestras vidas. Y, aunque parezca muy difícil, es lo más inteligente que podemos hacer porque hacer algunos pequeños cambios nos ayudará a conservar energía para lograr llegar a la meta.

© 2013 Sherrie Bourg Carter, todos los derechos reservados

El autor, Dr. Bourg Carter está en Facebook y Twitter.

A version of this article originally appeared in English.

publicidad
Acerca de
Sherrie Bourg Carter Psy.D.

Sherrie Bourg Carter, Dra. en Psicología, es psicóloga y autora de "High Octane Women: How Superachievers Can Avoid Burnout," se especializa en el área de las mujeres y el estrés.

Online:
LinkedIn, Twitter
Más de Sherrie Bourg Carter Psy.D.
Más de Psychology Today
Más de Sherrie Bourg Carter Psy.D.
Más de Psychology Today